Mahou San Miguel es una compañía de bebidas y servicios familiar, 100% española e independiente, líder del sector cervecero en nuestro país y con una sólida presencia internacional. Su modelo de negocio se basa en la cercanía y la conexión local, lo que le permite construir relaciones sólidas y duraderas allí donde opera y contribuir de manera relevante a su progreso socioeconómico. De hecho, por cada tres botellines, la compañía genera un euro de impacto económico en España.
Todo empieza con el producto que elabora en sus ocho centros de producción de cerveza ubicados en todo el territorio español y en los tres que tiene en Estados Unidos, así como en sus cuatro manantiales de agua mineral natural. Una huella industrial única, no solo por ser la más amplia del sector, sino porque le que permite jugar un rol diferencial a la hora de aportar valor allí donde desarrolla su actividad. La compañía cuenta, además, con una amplia red de distribución y la mayor cobertura geográfica a nivel nacional, manteniéndose muy cerca de sus clientes, distribuidores, proveedores y consumidores.
Su capilaridad y presencia única en España hacen que genere cada año 4.000 puestos de trabajo directos y 147.000 indirectos relacionados con su actividad y riqueza por valor de unos 2.340 millones de euros, cerca del 0,2% del PIB nacional.
Línea de envasado de anillas de cartón, pionera en Burgos - Foto: Rafa Rubio OPfotografosMás de 14 millones de contribución en Burgos
Año tras año, Mahou San Miguel invierte de manera decidida en su negocio y en sus instalaciones, trabajando con todo su ecosistema para reforzar su contribución y asegurar un comportamiento ambiental ejemplar en su entorno y en las comunidades en las que desarrolla su actividad.
Dentro del mapa de operaciones de la compañía, la fábrica de Burgos juega un papel clave, relevancia que se refleja en las inversiones que realiza cada año en estas instalaciones. Este 2024, tiene previsto destinar cerca de 5 millones de euros a proyectos clave orientados a mejorar la eficiencia, flexibilidad y competitividad futura de la planta, así como su impacto ambiental, económico y social.
La planta de Burgos lleva más de 50 años contribuyendo al progreso económico y social de la región. Un impacto positivo que se materializa en distintos ámbitos. La compañía crea alrededor de 170 puestos de trabajo directos y, solo el año pasado, realizó compras de bienes y servicios por valor de más de 14 millones de euros a más de 125 empresas burgalesas.
Mahou San Miguel, una huella industrial única - Foto: Rafa Rubio OPfotografosAdemás, la compañía impulsa numerosos patrocinios e iniciativas que contribuyen al desarrollo de actividades clave como la hostelería y el turismo. Destaca, por ejemplo, su proyecto "Vamos Bares 2030" para impulsar la sostenibilidad en los negocios de hostelería locales o "Creamos Oportunidades en Hostelería y Turismo", un programa impulsado por la Fundación Mahou San Miguel para promover el desarrollo del talento joven en hostelería y la formación y empleabilidad de personas que provienen de entornos con dificultades. Con una inserción laboral media del 90%, el programa está implantado a nivel nacional y está presente en la ciudad de Burgos desde hace casi diez años.
En el plano ambiental, la compañía trabaja para reducir su huella ambiental y consumo de recursos desde el origen de la materia prima (94% de origen nacional), hasta la distribución de sus productos a través de una movilidad eficiente y sostenible. Además, el mantener su cadena de valor muy cerca del lugar donde elabora sus productos le permite reducir de manera significativa su huella de carbono derivada del transporte.
Los productos de la compañía se elaboran con energía eléctrica 100% renovable y que todos sus centros son residuo cero, reutilizando el 99,9% en otros procesos.