El final del descuento de 20 céntimos por litro de carburante se ha dejado notar en los surtidores de Castilla y León, que han visto como el primer mes sin la medida implantada por el Gobierno de España el pasado 1 de abril se ha saldado con un notable descenso en los repostajes. Concretamente han bajado un 25 por ciento sobre el consumo medio experimentado durante los nueve meses –del 1 de abril al 31 de diciembre de 2022– en los que estuvo en vigor la medida, según los datos publicados ayer por la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores). Especialmente sensible ha sido el retroceso en la gasolina 95, que arroja una bajada del 30 por ciento y 8.000 toneladas menos que la media de los nueve meses previos, mientras que en el caso del diésel la disminución fue del 20% y 30.000 toneladas menos repostadas. Las estaciones de servicio han visto de esta forma los efectos que ha tenido la decisión del Ejecutivo de eliminar el uso generalizado del descuento de 20 céntimos, y limitarlo al sector del transporte, después de haber supuesto un ahorro de 300 millones de euros a los consumidores de Castilla y León. De acuerdo con los datos del Cores, el primer mes de este año las gasolineras despacharon 113.892 toneladas de diésel –la cifra más baja para un enero desde 2014, sin contar un 2021 lastrado por las restricciones de la pandemia–, y otras 18.050 toneladas de gasolina 95.
«En enero si que se notó el impacto del fin del descuento, porque los precios eran altos», reconoce a este periódico Rafael Pizarro, presidente de la Agrupación de Vendedores al por Menor de Carburantes y Combustibles de Castilla y León (Avecal), que, no obstante, alza la voz de alarma sobre la situación actual del sector. «La bajada en el consumo estamos viendo que ya no es una cuestión de precios, porque se encuentran ahora más bajos de lo que estaban con el descuento. Ahora es un problema de incertidumbre social por la situación económica». Realidad que los números corroboran. A falta de conocer los datos oficiales de consumo de carburantes y su precio medio durante febrero y marzo, las webs que realizan un seguimiento diario del coste del diésel y la gasolina 95 dejan a las claras un significativo descenso del coste del litro repostado con respecto al pasado ejercicio.
Castilla y León registró durante la parte final del 2022 un precio medio del gasóleo A de 1,70 euros por litro aproximadamente, lo que, una vez aplicado el descuento del Gobierno, se traducía en un coste real de 1,50 euros. Cuantía ligeramente inferior a los 1,55 euros que se están pagando actualmente en las estaciones de servicio de la Comunidad por el diésel. Algo similar, aunque menos pronunciado, ocurre con la gasolina 95, que ha pasado de 1,7 euros –1,50 con descuento– a 1,63. «La lectura es que existe una incertidumbre sobre el futuro de la economía que se une al impacto de la inflación», resume Pizarro, que insiste en que «los precios han bajado y ya están casi al nivel que había con el descuento».
Dinero adelantado
El presidente de la Agrupación de Vendedores al por Menor de Carburantes y Combustibles de Castilla y León también reconoce, por otra parte, que tras las denuncias iniciales del sector, elGobierno de España ya ha abonado la práctica totalidad del dinero que las gasolineras tuvieron que adelantar cada mes para aplicar el descuento de 20 céntimos por litro.«La inmensa mayoría de las gasolineras de Castilla y León ya han recibido todo el dinero que tuvieron que poner para cumplir con la ley», concluye Pizarro.