El Ayuntamiento de Burgos pedirá a la Junta de Castilla y León la cesión del tramo urbano de la carretera BU-800 que arranca de la glorieta de la calle Madrid y continúa por el paseo de los Pisones hasta culminar en la localidad de Cardeñadijo. Detrás de esta solicitud del Consistorio capitalino a la institución regional se hallan las quejas de los vecinos de la zona sur sobre el estado del vial y sobre la tardanza en la atención a sus peticiones de reparación de los baches y reasfaltado de la calzada.
El concejal de Urbanismo, Juan Manuel Manso, llamará a la puerta de la administración regional para tratar de firmar un convenio de cesión, al que tendrá que dar el visto bueno el área de Patrimonio municipal. En principio, el Consistorio no prevé exigir que la Junta entregue el vial en perfectas condiciones, dado que en la actualidad está muy deteriorado.
La calzada presenta innumerables socavones a lo largo de su recorrido y se ha desprendido parte del asfaltado en algunas zonas, lo que produce impactos en los vehículos que circulan por ella que llegan incluso a romper los parabrisas. Solo hay que hacer un recorrido por el vial para constatar el mal estado en el que se encuentra ya desde la rotonda de la calle Madrid. En el primer paso de peatones se empiezan a ver agujeros y grietas en el firme, una situación que se repite a lo largo de todo el trayecto urbano. El asfaltado está totalmente cuarteado debido a la falta de mantenimiento y en algunos tramos los socavones son enormes.
Desde la Asociación de Vecinos Nuestro Barrio han trasladado escritos a la Delegación Territorial de la Junta y precisamente esta pasada semana se han hecho algunas mejoras al principio de la calle echando gravilla en los socavones para evitar males mayores, pero lo cierto es que a lo largo del recorrido hasta el viaducto hay que irlos sorteando.
El delegado territorial de la Junta, Roberto Saiz, reconoce que se hacen labores de mantenimiento, pero la vía soporta elevado tráfico que provoca que se vuelva a estropear. «Se continuará realizando este tipo de trabajos», apuntó.
Sin embargo, Saiz señala que una intervención más integral requeriría de un proyecto y una partida económica. «De momento esta actuación no se va a acometer, dado que hay que ver si se puede realizar con fondos de conservación o necesitamos hablar con la Dirección General de Carreteras».
Saiz reconoce que la cesión es una de las opciones que se pueden estudiar, pero este paso requiere de un consenso de las dos administraciones. «Los futuros contactos determinarán las condiciones de cesión, dado que es un tema complejo y depende de la voluntad de las dos partes», añadió el representante de la administración regional en Burgos.
Desde la Asociación de Vecinos Nuestro Barrio reiteran la necesidad de adoptar una solución por parte de ambas administraciones para que este vial esté en perfectas condiciones y nos se produzcan accidentes por su estado.