El Ayuntamiento de Estépar está inmerso en una de las obras más importantes con la que comienza esta legislatura tras las elecciones del pasado mes de mayo. Dos años después de la cesión definitiva por parte de la Junta de Castilla y León del antiguo silo o almacén de cereal ubicado en la entrada de la localidad, junto a la carretera, en el viejo inmueble han comenzado las obras para adaptarle a los nuevos usos previstos por el Consistorio.
De esta manera, se ampliarán los servicios a los vecinos, no solo de Estépar sino de las diez pedanías que abarca el municipio, como son Mazuelo de Muñó, Quintanilla Somuñó, Arenillas, Pedrosa de Muñó, Hormaza, Vilviestre de Muñó, Villagutiérrez, Villavieja de Muñó, Medinilla y Arroyo de Muñó. Entre todos abarcan una población de 650 vecinos que reivindican actividades sociales y de ocio.
La inversión prevista para adecuar el silo a las necesidades provistas supera los 250.000 euros, afirma el alcalde de la localidad, Jaime Martínez. Ya se ha realizado una primera inversión de unos 70.000 euros en el cambio total del tejado que estaba en pésimas condiciones. Martínez espera iniciar a último de año o primeros de 2024 el resto de las obras que afectan tanto al interior como al exterior, ya que el proyecto prevé la urbanización de todo el entorno con asfalto, aceras y la habilitación del párking, que tiene una disponibilidad para unas 40 plazas; este aparcamiento se destinará exclusivamente para coches, ya que no se permite estacionar camiones en el casco urbano, recuerda el regidor, ya que estos tienen sus áreas de descanso y las gasolineras.
En cuanto al interior, con una superficie que ronda los 700 metros cuadrados, se destina actualmente a almacén municipal. El proyecto contempla distribuirle en varios compartimentos para albergar un gimnasio, por una parte, y una amplia cocina y comedor, por otra, además de baños y duchas y dejar otra sala como almacén para guardar una furgoneta eléctrica y las bicicletas también eléctricas que en breve llegará al municipio una vez que ha sido elegido para poner en marcha el proyecto de sostenibilidad al que optó Estépar a los fondos europeos Next Generation. Son 22 las bicis concedidas que, según explica el alcalde, se repartirán entre la cabecera del municipio y las pedanías para uso de los vecinos y que estos puedan trasladarse a Estépar con ellas a realizar sus gestiones y compras.
En cuanto a la sala que se habilitará como gimnasio estará dotado con distintos aparatos e igualmente, en ese espacio se podrán llevar a cabo otras actividades como yoga, pilates, gimnasia o bailes que ya realizan las mujeres en el polideportivo donde no hay calefacción y el invierno se las hace duro, dice Martínez.
En cuanto al txoko, contará con una cocina industrial y un comedor que podrá acoger hasta dos centenares de comensales. Estará a disposición de todos los vecinos, familias y cuadrillas de Estépar y las pedanías que podrán reservarle para celebrar comidas de eventos festivos, cumpleaños, bodas, bautizos o cualquier tipo de acontecimiento que reúna a un buen número de personas. El alcalde entiende que ofrecer este servicio a los ciudadanos es obligado, «para que se mantenga la gente y si es posible que vengan más», añade. Será el espacio más grande de todo el inmueble, con unos 500 metros cuadrados.
El edificio tendrá calefacción, recuerda el alcalde, aunque aún no se ha concretado qué sistema se utilizará porque se quiere instalar geotermia e, incluso, placas solares, pero se estudiará la mejor opción.