«Estoy muy sensibilizada con el tema de la despoblación y tengo vocación de servicio público», esta es la carta de presentación de Angie Gallego Peña, una madrileña que un buen día decidido trabajar en la creación de una candidatura para optar a la Alcaldía de Peral de Arlanza, municipio en el que en las elecciones de pasado mes de mayo no se presentó nadie y en el que se votará en noviembre, si finalmente -como parece que ocurrirá- alguien formaliza una candidatura antes de las doce horas de hoy lunes y la denuncia de Angie no lo impide.
Lo que comenzó como una aventura 'política' para esta madrileña, que no milita en ningún partido, aunque reconoce que ha estado afiliada a dos, se ha convertido en una pesadilla por los «insultos y amenazas» que afirma está recibiendo a través de las redes sociales de los integrantes de una candidatura y que ya ha puesto en conocimiento de la Guardia Civil, «que me ha dicho que presente una denuncia y me lo estoy pensando».
A pesar de los 240 kilómetros que separan Madrid de Peral de Arlanza, de no conocer el pueblo ni a ningún vecino, es lo bueno y lo malo de las redes sociales, Angie tiene perfectamente 'identificadas' a las personas que han realizado los comentarios «amenazantes» e insultos y afirma, sin ninguna duda, que se trata de miembros de la candidatura del PP. «No entiendo estas formas de actuar, me han pillado por sorpresa y estoy muy afectada... tengo los nombres y los apellidos de las personas que me han intimidado para que no me presente como candidata a la Alcaldía de Peral», afirma esta administrativa, que asegura sigue teniendo vocación política; «pero hasta ahora nunca había querido ser candidata y ahora lo hago sin el respaldo de ninguna formación política».
Algunos vecinos, como se puede comprobar en el extenso dossier de comentarios que ha recopilado Angie en Facebook, Instagram y WhatsApp, califica a esta madrileña de 'paracaidista' e intrusa «e incluso me acusan de tener un interés económico en el pueblo cuando lo cierto es que el pastel se lo reparten entre ellos», asegura, a la vez que tacha de «tomadura de pelo» el hecho de que las personas que ahora la insultan por tratar de impedir que el pueblo se quede sin elecciones y sin alcalde «en mayo no quisieran presentarse y ahora sí lo hagan», reitera, a la vez que reconoce que ha mantenido una conversación con el alcalde en funciones, Gabriel García Maté, para hablar y analizar la situación.
«No lo van a permitir». Angie, que todavía no tiene decidido si formulará una denuncia 'oficial' por insultos y amenazas, los estoy valorando y la Guardia Civil me dice que lo haga porque se trata de un delito, tampoco ha decidido si presentará su candidatura o no, aunque el plazo se acaba el lunes y en estos momentos está ella sola. «Lo que tengo claro es que los que me insultan no van a permitir que una persona de fuera como yo esté en el Ayuntamiento de Peral, están a la defensiva y dicen que voy a saquear el Ayuntamiento», afirma, a la vez que reitera que «no tengo ningún interés económico».
La primera consecuencia de esa campaña para desacreditarla ha sido que ningún vecino se sume a su candidatura y que previsiblemente solo concurra a los comicios la del PP con algunos ediles que ahora están en funciones y que ha decidido 'repetir', con un nuevo cabeza de lista, para evitar que alguien como Angie dirija los destinos de Peral.