Desde el 6 de noviembre de 1986 al 19 de mayo de 2013, el Manchester United solo tuvo un inquilino en el banquillo: Sir Alex Ferguson. Desde que el escocés finalizó su etapa 'red devil', el club de Old Trafford ha sido dirigido por nueve técnicos. La alargada sombra del de Govan ha engullido ya muchos preparadores, pero el pasado viernes la propiedad, que lleva en la entidad solo unos meses, decidió contratar a Rúben Amorim, un estratega que ya levantó a un 'gigante' dormido como el Sporting de Portugal.
Jim Ratcliffe, dueño de Ineos y principal cabeza visible del United, solo tardó unas 12 semanas en echar marcha atrás en la decisión que tomó el pasado mes de junio cuando renovó a Erik ten Hag por vencer al Manchester City en la final de la FA Cup, aunque su temporada fue desastrosa.
La propiedad le concedió al neerlandés los fichajes que reclamó en verano, pero el conjunto siguió la misma línea que el curso anterior y la era del ex del Ajax acabó con una derrota ante el West Ham (2-1).
En este contexto llega Amorim a un club desnortado en cuanto a la toma de decisiones, que hace unos meses se hizo con los servicios de Omar Berrada y Dan Ashworth, dos 'buques insignia' del City y del Newcastle. Ellos fueron los que recomendaron al portugués, un técnico de una carrera meteórica que en tan solo cinco años ha pasado de dirigir al Casa Pia a ocupar el banquillo del Manchester United.
El Sporting de Braga lo fichó, derrotó a Benfica y a Oporto, ganó la Copa y el Sporting vio en él a una especie de elegido para volver a la élite. Lo logró con los de Lisboa con un sello claro: esquema con tres centrales, con las bandas para dos carrileros de largo recorrido, un doble pivote, los extremos por dentro y una referencia ofensiva.
Con ese ideario llega a la Premier, a un equipo 'red devil' que posee la materia primera para estar mucho más arriba de lo que actualmente está. Amorim se encontrará en Mánchester con Manuel Ugarte, un mediocentro al que él colocó en la élite y que apunta a ser uno de sus extensiones sobre el campo.
Quizá, en la actual plantilla, le falten carrileros de su gusto, sobre todo en la izquierda, y le sobren extremos. Marcus Rashford, Alejandro Garnacho, Amat Diallo y Antony pueden ser los más perjudicados con la llegada del luso, toda vez que el argentino sí podría ubicarse en una plaza más interior.
Si eso no ocurre, MasonMount tiene los focos sobre su cabeza por un posible relanzamiento de su carrera con Amorim. Arriba, Rasmus Hojlund presenta un perfil muy similar al de Viktor Gyokeres, por lo que podría ser el 'nueve' elegido por un preparador que, lejos de decantarse por un estilo claro, en Portugal dominó casi todos los aspectos, con y sin balón, juego directo o más pausado. Pero la Premier League y elUnited son harina de otro costal.