Hay muchas formas de viajar, pero la libertad y comodidad que aportan las autocaravanas las convierten en un medio de transporte confortable y ofrece una gran cantidad de posibilidades para sus usuarios. Desde Madrid, Málaga o Valencia, son muchos los turistas que paran en Burgos para descansar y visitar la ciudad. Aseguran que el párking situado junto al conservatorio tiene todo lo necesario para pasar allí algunos días y pasear por las calles de la capital. Para unos, es la primera vez que utilizan este medio para moverse por España. En cambio, otros llevan ya más de veinte años viajando por el país con la casa a cuestas y están encantados de seguir haciéndolo. Ellos son Germán y Ramón, que, junto a sus mujeres, recorren cada año tanto el norte como el sur y no se cansan de conocer gente, visitar nuevas localidades y descubrir los lugares más escondidos del país.
Ya jubilados, llegan desde Alcorcón y Villanueva de la Cañada, municipios de la Comunidad de Madrid. Partieron con este vehículo hace unos días hacia el norte y, en esta ocasión, con la intención de visitar los pueblos de Castilla y León. Durante las próximas dos semanas recorrerán juntos las carreteras castellanas y se irán parando en los lugares que más les llamen la atención. «Hasta que se nos acabe el dinero», confiesa Germán que durará esta nueva aventura.
Los dos dejan claro que, desde hace años, las autocaravanas son su estilo de vida. Durante periodos de veinte días, se marchan a cualquier zona de España. Ahora que es verano, suelen viajar más hacia el norte, por el clima. Y en invierno siempre se acercan a Andalucía o la Comunidad Valenciana, durante los meses de septiembre y octubre, cuando todavía no anochece tan temprano. Desde Galicia hasta el País Vasco, pasando por Asturias y Cantabria, reiteran que conocen casi todas las zonas de la península.
De hecho, Ramón pertenece a una asociación en Castilla y León, con la que, durante la época más fría del año, suelen hacer quedadas todos los meses, «damos mucha vida a los pueblos donde vamos», asegura el hombre. Una prueba más de la experiencia que tienen en este ámbito.
Una de las ventajas más gratificantes de este medio de transporte es el hecho de conocer a tantas personas. «Como estamos cada día en un sitio, gente que has conocido en Málaga te la puedes volver a encontrar en cualquier otro lugar por casualidad», cuenta Germán.
Por otro lado, la seguridad también es muy importante a la hora de viajar con estos vehículos. Germán y Ramón nunca han sufrido ningún robo. Aun así, son precavidos, cuentan con alarmas y seguros en los vehículos, e intentan pararse siempre en zonas en las que haya más viajeros como ellos, «es más seguro estar en un lugar rodeado de casas, por si hay que pedir auxilio», confiesa Germán.
En Burgos pasarán dos o tres días más, según las ganas que tengan de quedarse. Y tras ese tiempo, seguirán su ruta por el resto de Castilla y León.