El Aparejadores Rugby continúa dando forma a la platilla que, por tercera temporada consecutiva, jugará en División de honor. De esta manera, Juan Ignacio Albareda y Matius Pisapia han alcanzado un acuerdo con la entidad burgalesa para la temporada 2020/21. El primero de ellos se formó en el Club Atlético San Isidro justo antes de venir a España y no es un desconocidopara el equipo ni mucho menos. Albareda, lastrado por las conmociones sufridas en los primeros partidos de la liga pasada, tuvo que regresar a Argentina. Su ausencia fue suplida por su compatriota Escuti, pero ahora de nuevo se encuentra en las condiciones idóneas para iniciar su segunda etapa en el club. Se trata de un jugador muy agresivo y trabajador, sobre todo a nivel defensivo.
Por otra parte, Mattius Pisapia, un jugador fundamental en el quince de Juan Gonzalez, renueva su contrato un año más. El jugador, de nacionalidad española y 26 años de edad, lleva en el UBU Colina Clinic desde el año 2017. Pese a nacer en Venezuela, fue criado en Almería desde los 7 años de edad. Por ello es convocado, de manera habitual, con el combinado español absoluto.
En el mismo comunicado en que se anunciaban estas incorporaciones, se han hecho oficiales las negativas, tanto para el fichaje del jugador japonés Yutaro Fujiyama, anunciado en diferentes medios, como para la renovación de Jerry Surumi, pues la negocaciación con el jugador ha dejado patente las grandes diferencias económicas entre ambas partes. De esta manera, el conjunto burgalés pone dos pieza más en su puzzle y mantendrá una parte importante del bloque, pese a las circunstancias y efectos que ha generado la crisis sanitaria.
Aparejadores Rugby sigue a la espera de la confirmación de varios jugadores destacados del pasado curso como son András Masuyama, Juan Aristemuño, Ikifusi Matamu, y Marc Sánchez. De esta forma, los esfuerzos de directiva y staff se concentran en la incorporación de delanteros que suplan los puestos dejado por Jorge Fuente, Diego Hasse y Ikapote Tupai.