El rodaje estos días de La huella del mal en Atapuerca vuelve a traer a la actualidad a los yacimientos una vez finalizada la campaña de excavación, el treinta aniversario del descubrimiento de Homo antecessor y los 25 años de la Fundación Atapuerca. Aunque ateniéndonos a las estadísticas, tanto el Museo de la Evolución Humana como los centros vinculados a la sierra mantienen su tirón todo el año. No en vano, y partiendo de un 2023 que fue muy bueno en número de visitantes, hasta el puente de agosto han acudido a recorrer el Sistema Atapuerca 30.200 personas más que el año pasado en el mismo periodo. Y eso teniendo en cuenta que precisamente los meses estivales (junio, julio y agosto) han sido mucho más flojos que el año pasado.

De hecho eso es lo que más llama la atención, porque mantiene la tendencia al alza todos los meses salvo los de verano -y en abril, pero este mes se explica porque la Semana Santa cayó este año en marzo-, y aún así estamos hablando de un incremento del 9%.

De todas formas evaluar estas circunstancias no es fácil, ni siquiera para quienes trabajan en el Sistema Atapuerca, un complejo que abarca el MEH, los yacimientos, el Centro de Arqueología Experimental (CAREX) y el Centro de Acceso a los Yacimientos (CAYAC). «En los porcentajes de visitantes a los yacimientos y al CAREX estamos jugando fundamentalmente con la climatología porque es muy distinto ir a los yacimientos lloviendo o nevando que con una temperatura agradable, como ha hecho este año», sostiene Aurora Martín, directora gerente del Sistema Atapuerca (SACE), para explicar el incremento.

En cuanto al descenso estival, hay algunas circunstancias que han hecho especial este verano. Por un lado, a mediados de junio se clausuró la exposición que tenía como protagonista el esqueleto fosilizado de un mamut, y que ha sido de las más visitadas del Museo de la Evolución Humana. «Esa muestra ha arrastrado a mucho público y de todas las edades. Primero por el interés y en segundo lugar porque va a ser muy complicado volver a ver en Burgos algo así», recalca Martín.

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