Había tantas ganas de Sampedros y de demostrarlo que los pañuelos se agotaron en menos de tres días. Muchos se quedaron con un palmo de narices. Hasta ayer, que se puso a la venta una nueva remesa (5.000 unidades más), aunque sin el ribete marrón dada la necesaria celeridad en la impresión. Pues apenas unas horas después, ya no quedan.
Este mediodía se han vendido los últimos y algunos burgaleses que habían hecho cola se han quedado sin esta prenda característica de las fiestas y han expresado su malestar por las redes sociales. El alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, ha asegurado también a través de su perfil en Twitter que este "se han hecho más pañuelos que nunca", que "otros años también se agotaban" y no le sorprende la gran acogida que han tenido esta vez: "Es obvio que haya una mayor demanda que otros años ya que la calidad y el diseño han mejorado sensiblemente respecto a los que se hacían antes". "Todo un éxito", valora De la Rosa.
Cabe recordar que los pañuelos se han podido adquirir por un euro y que toda la recaudación obtenida se destinará a la Asociación para la Defensa de la Mujer La Rueda.