Marear la perdiz para no solucionar nada. Las administraciones se han pasado la pelota de una a otra y de otra a una para dejar todo como estaba con respecto al «surrealista» autobús que pasa por Cerratón de Juarros y que, en lugar de llevar a los vecinos hasta Burgos, les deja tirados en Olmos de Atapuerca. La Junta de Castilla y León aseguró que el responsable era el Gobierno de España, mientras que ahora estos han respondido a una pregunta escrita formulada por el senador Javier Lacalle explicando que la administración regional «tiene la competencia para ampliar la ruta hasta Burgos dentro del itinerario concesional».
Diario de Burgos se subió hace dos años a este medio de transporte para comprobar de primera mano lo absurdo de un viaje en el que no se monta nadie y el alcalde, Pedro Marina, ya no sabe qué más hacer para encontrar una solución. «Es una vergüenza estar sin servicio, que nos deje en Olmos no nos sirve para nada, queremos seguir teniéndolo, pero que llegue a Burgos y que preste un servicio», asegura. Reconoce que otros municipios del entorno cuentan con el transporte a la demanda un par de días a la semana y por ello no han alzado la voz con la misma fuerza que él. «Aquí estamos sin autobuses», denuncia, mientras exige contar con viajes hasta la capital para poder hacer la compra, ir al médico o a lo que cada uno quiera.
Javier Lacalle elevó la cuestión al Senado desarrollando que «desde hace años se produce una situación escandalosa por cuanto la concesión de una de las rutas de transporte público por parte del Ministerio de Transportes» y, además, pidió una explicación para que no se recorra el tramo de apenas cinco kilómetros que hay desde Olmos hasta la vecina Rubena. Eso sí, no se concretó el número de viajeros, como se solicitaba. Sin embargo, el Gobierno responde que «la ruta 14 Cerratón de Juarros-Olmos de Atapuerca es un servicio parcial del servicio público de transporte regular de uso general de viajeros por carretera entre Burgos y Zaragoza (VAC-235)», por lo que, atendiendo al artículo 2 de la Ley 5/1987, la Junta tiene la competencia para su ampliación.
Además, en la respuesta del Gobierno también se menciona que el transporte regular de uso general de viajeros por carretera entre Burgos y Zaragoza (VAC-235) se adjudicó en 2016 a la empresa Logroza S.L., del grupo Jiménez, y su plazo finaliza el 28 de noviembre de 2026. Mientras, se recuerda que en el anterior contrato se hacían las mismas paradas, ya que la Dirección General de Transportes Terrestre pidió en 2013 un informe a la Dirección General de Transportes de la Junta sobre si deseaba la segregación de los tráficos de la Comunidad y no lo recibió, por lo que estaban en el anterior contrato y quedaron incluidos en el actual.
En cuanto al motivo por el cual ruta Cerratón-Olmos no llega a la capital burgalesa, se defiende que «la Administración General del Estado no tiene competencia para autorizar nuevos tráficos dentro de la Comunidad Autónoma de Castilla y León en un servicio de competencia estatal». Por lo tanto, el alcalde, Pedro Marina, ya avanza que solicitará una nueva reunión con el delegado territorial de la Junta, Roberto Saiz, para ver si por fin se pone una solución.
Nadie de la zona utiliza este medio de transporte, que cuenta con paradas en Arraya de Oca, Villaescusa la Sombría, Hiniestra, Barrios de Colina, San Juan de Ortega, Santovenia de Oca, Agés y Atapuerca, por lo que se pide que permita al vecindario desplazarse hasta la capital burgalesa y cuente así con una utilidad de la que ahora carece. Consideran que se trata de una pérdida de dinero puesto que no se presta ningún servicio y se confía acabar con este despilfarro.