La celebración del Parral dejó ayer un balance total de 90 personas teniendo que ser atendidas por los servicios de emergencia a causa de alergias, quemaduras o golpes de calor. Seis de ellos precisaron de un traslado al Hospital Universitario de Burgos a causa de un traumatismo, una enfermedad torácica y cuatro etílicos. Según el Ayuntamiento de Burgos en algunas horas se llegaron a registrar picos de hasta 35.000 personas.

Entre los servicios desplegados destacó la presencia de 16 bomberos del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento, medio centenar de agentes de la Policía Local en el puesto de las Veguillas entre la mañana y la tarde, 35 voluntarios de Protección Civil y 32 personas vinculadas a la Cruz Roja, dos de ellas médicos y otras dos enfermeras.

Las actuaciones que llevó a cabo la Policía Local terminaron notificando ocho denuncias por tenencia de sustancias estupefacientes para autoconsumo, cuatro denuncias vinculadas a venta sin autorización en la zona de venta ambulante y en este mismo espacio también se procedió a la detención de uno de los vendedores por atentado a agente de la autoridad.