Los sindicatos CCOO y UGT también se suman al PSOE y abandonarán su presencia como patronos en la Fundación Castilla y León, antes Fundación Villalar, y apostarán por la creación de otra entidad plural que "refuerce los valores y el espíritu comunero que consideran que no respeta ni refleja la actual presidida por Carlos Pollán (Vox)".
Durante la presentación del Manifiesto de Villalar que leerá el 23 de abril, día de Castilla y León, en la campa el alcalde de la villa comunera, Luis Alonso Laguna, el secretario general autonómico de CCOO, Vicente Andrés, confirmó que acompañan al PSOE en la salida de la Fundación, adscrita a las Cortes, porque "ni se convoca ni tampoco sigue los fines para los que se creó".
"No merece la pena estar en ella", afirmó poco después el secretario general de UGT Castilla y León, Faustino Temprano, que explicó que serán los órganos internos los que tomen de manera oficial la decisión, pero avanzó también que" no representa los ideales para los que se constituyó".
Como su homólogo de CCOO, apostó por la creación de otra fundación plural que refuerce los principios de igualdad, libertad y fraternidad que atribuyó a los comuneros como protagonistas de la primera revolución liberal en el mundo.
En su intervención, el secretario general del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, reafirmó el abandono de la Fundación Castilla y León, como ya avanzara ayer, para no ser "cómplices de Mañueco para promocionar la ideología neofranquista del presiente de las Cortes".
Por su parte, el alcalde de Villalar, Luis Alonso Laguna, precisó que como institución no se puede salir pero manifestó que él ya no iba a las reuniones, por lo que en la práctica se puede decir que tampoco está.
En 2019, el entonces presidente de las Cortes, Luis Fuentes (Ciudadanos) se pronunció por disolver la Fundación Villalar Castilla y León al considerar que no había cumplido con los fines de su constitución por consenso en el año 2003. Posteriormente, dio marcha atrás y apostó por abrir un periodo de debate para su transformación.
De esa manera, se acordó el cambio de nombre, perdió su nominación de Villalar y se dejó solo en Castilla y León para no herir sensibilidades, y se abrió a nuevos patronos. En ese momento, ya apostaron por su disolución Podemos-Equo, UPL y Vox.