Burgos sube con retraso al tren del expediente electrónico

D. ALMENDRES / Burgos
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El Ayuntamiento aún no ha alcanzado la plena implantación del cambio iniciado hace un año mientras otras capitales ya han incorporado herramientas vinculadas con la inteligencia artificial

El Ayuntamiento de Burgos se centra en esta fase del proceso en acabar con la convivencia de expedientes. - Foto: Jesús J. Matías

Llegados a este punto, solo queda mirar al futuro y centrarse en acabar de la mejor manera el camino iniciado a pesar de que el retraso acumulado en la plena implantación del expediente electrónico deje al Ayuntamiento de Burgos en un vagón trasero con respecto a otras capitales de provincia.

La administración local inició hace un año un proceso que promete y debe agilizar los trámites administrativos, tanto los internos como los completados por los ciudadanos en la rutina diaria. Después de muchos años de espera provocada por diversos aplazamientos -como el vivido por la crisis sanitaria de 2020- o el incumplimiento reiterado de los plazos teóricos que se había autoimpuesto la normativa, el Consistorio comenzó una larga andadura en la que aún queda muy lejos la línea de meta.

El cambio impulsado en la aplicación de las gestiones afectó de inicio a áreas como Tesorería o Intervención, además de a otros procesos como los pagos a proveedores, la facturación o la tramitación de las subvenciones municipales. Con el paso del tiempo la herramienta se extendió al resto de áreas y, una vez completada la primera fase de este largo proceso, el Ayuntamiento de Burgos aún se centra en la consolidación de los nuevos procesos electrónicos hasta superar definitivamente el estilo tradicional.

Se busca una administración 'sin papeles', un movimiento considerado por el anterior equipo de Gobierno como «el mayor cambio en los últimos treinta años» para convertir al Ayuntamiento «en un espacio más eficaz, más eficiente y más productivo».

Además de las ventajas que ofrece a la organización interna de las administraciones, el expediente electrónico permitirá la futura implantación de programas y plataformas adicionales que ayuden a agilizar los trámites de los ciudadanos. Algunas capitales avanzan varios pasos por delante del Ayuntamiento. Es el caso de Valladolid, donde el equipo de Gobierno anunció su interés en adquirir un software con inteligencia artificial para acelerar la tramitación de licencias y otras gestiones. Mientras tanto, el Consistorio de Sevilla ya ha incorporado una herramienta de nueva generación para facilitar los trámites urbanísticos.

Otros municipios como Torrejón de Ardoz o Alicante han incorporado asistentes virtuales a su red de conexión online con el ciudadano y la Comunidad de Madrid ha avanzado que la unificación de los procesos administrativos en una única aplicación digital.

Burgos aún deberá esperar para incorporar estas tecnologías en las tareas de la administración electrónica, si bien el concejal de Modernización Administrativa y Digitalización, César Barriada, asegura que el Ayuntamiento llegará «a medio plazo» al nivel de los más avanzados.

Paso a paso. «Es cierto que algunos ayuntamientos trabajan desde hace mucho tiempo con el expediente electrónico y eso les da la posibilidad de integrar nuevas aplicaciones», zanja, para insistir en que Burgos «llegará a ese paso» con el tiempo. «Actualmente nos centramos en que todo funcione de forma correcta en todas las áreas», zanja.

Barriada asegura que el desarrollo del expediente digital «es una prioridad» y el proceso será continuo. La administración local se centra en completar la implantación de la herramienta y en incluir «las mejoras previstas». Todo ello requiere paciencia y pone en juego otro factor fundamental, la formación de los trabajadores. «Ahora todo es distinto y requiere un periodo de adaptación. En ello estamos, en perfeccionar los avances realizados hasta el momento», insiste.

«Lo importante es que la plataforma sea estable. Debemos reducir las incidencias al mínimo posible para que todo esté perfectamente implantado y los profesionales hayan completado la formación», profundiza un César Barriada tranquilo y convencido del éxito de esta apuesta.

Uno de los primeros grandes objetivos es acabar con la convivencia de los archivos antiguos con los digitalizados. El Ayuntamiento entiende que ese paso ayudará a desarrollar «una gestión más eficaz» y solo a partir de entonces «se podrá avanzar en los procedimientos».

Y es que Barriada asume la importancia de seguir el camino iniciado a pesar del retraso acumulado. Aunque el concejal matiza que se tiende a decir «que todo es inteligencia artificial», en muchos casos se trata de poner en marcha «aplicaciones de automatización de respuestas». Sea como fuere, el responsable del área de Modernización Administrativa y Digitalización avanza que «hay muchas herramientas útiles» que estarán disponibles en el futuro para facilitar los trámites administrativos.