La Policía Nacional detuvo el pasado 26 de mayo por la mañana en Burgos a un varón como presunto autor de un delito de robo con fuerza en una cafetería del centro de la ciudad. El sospechoso fue sorprendido intentando sustraer una bici en la plaza del Mío Cid horas después del asalto al negocio hostelero. 

Una empleada del céntrico establecimiento advirtió el hecho cuando abría la cafetería a las 8:30 horas, al encontrarse fracturado el cristal de la puerta trasera, y avisó a la Policía Nacional, que poco después, sobre las 9 de la mañana, localizaba y detenía al presunto autor de los hechos mientras intentaba sustraer una bicicleta en la plaza del Mío Cid. Llevaba consigo, en los bolsillos, parte de los billetes y monedas sustraídas.

Como este hombre presentaba cortes en las manos y restos de sangre, los agentes sospecharon sobre su posible participación en el robo dentro de la cafetería, y practicaron gestiones respecto de las cámaras de seguridad que hubieran podido captar el ilícito penal y su responsabilidad en el mismo.

Detenido tras asaltar y destrozar de madrugada una cafetería

Dichas gestiones fueron positivas, por lo que esta persona fue detenida y trasladada bajo custodia policial. Primero al hospital para ser atendido de sus lesiones, negándose a ello ante los facultativos, y posteriormente a dependencias policiales.

Los agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana pudieron comprobar los importantes destrozos materiales provocados en el interior del establecimiento, tanto en la barra como en la cocina interior. El presunto autor se había llevado el cajón de la caja registradora, pero previamente había dejado todo revuelto, rompiendo y tirando al suelo cuanto se encontraba a su paso.

Según la denuncia presentada con posterioridad por los dueños, estos daños afectaron al monitor del ordenador, a la caja registradora, a la campana extractora y también a la instalación eléctrica y de fontanería.

Durante esa misma mañana y poco después, un empleado municipal de limpieza localizaba en la vía pública -muy cerca del lugar del robo- el cajón de la registradora que el detenido presuntamente se había llevado. Se lo dio a una dotación de la Policía Local de Burgos, que a su vez lo entregó a la Policía Nacional para constancia en las diligencias practicadas, ya entregadas a la Autoridad Judicial.

Al detenido por estos hechos le constan en su haber numerosos antecedentes policiales previos, en particular por robos con fuerza en las cosas y robo con violencia/intimidación.