Hace tan solo una semana que se conocieron las notas de la temida Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), con un resultado global de más de un 98% de alumnos aptos. Sin embargo y a pesar de este elevado porcentaje de éxito, las calificaciones no convencieron a todos, de ahí que hicieran uso del derecho de solicitud de revisión de exámenes. Un total de 326 estudiantes eligieron esta vía convencidos de una posible mejora de sus calificaciones, aunque con el riesgo añadido de que también pueden empeorarlas, lo que supone ya el 20% de los matriculados en la convocatoria de primeros de junio, a la que se presentaron 1.615, según la información de la Universidad de Burgos.

La cifra de peticionarios resulta un 11,08% superior a la del año pasado, cuando optaron por esta misma vía 294, que a su vez representaban el 18% de personas evaluadas (1.644). Para la vicerrectora de Estudiantes, Verónica Calderón, este incremento responde más a «ciclos o casualidades» que a una «mayor complejidad de los ejercicios», tal y como sostiene que han reconocido los propios alumnos. Además, descarta que se trate de un crecimiento significativo y enmarca los datos dentro de un escenario de «normalidad».

El 81,6% que quienes presentaron reclamación (266), con un plazo de tres días que acabó el pasado miércoles, lo hicieron en una o varias asignaturas, ya fuera de la fase general o específica, mientras que el resto (60) se centraron solo en los de esta última con el objetivo, en ambos casos, de arañar aunque fuera unas décimas su nota de corte, clave para quienes quieren acceder a grados de especial exigencia. Por este último motivo, Biología volvió a encabezar las revisiones de exámenes al ser una de las materias que más pondera a la hora de poder entrar en carreras vinculadas a la salud, seguida de Química y Física.

(Toda la información en la edición en papel de hoy de Diario de Burgos)