Proyectos aparcados, cientos de miles de euros tirados

J.M. / Burgos
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Una decena de trabajos encargados a estudios de arquitectura el pasado mandato se han desechado o han sido relegados por otras actuaciones consideradas más prioritarias por el nuevo equipo de gobierno

El proyecto para remodelar la avenida Derechos Humanos se aprobó en 2022, pero está aparcado. - Foto: Luis López Araico

Los cambios de color político al frente de las instituciones suponen en muchas ocasiones que quienes llegan al poder huyen de lo que hicieron sus predecesores o establecen un orden de prioridades que les lleva a meter en el congelador o, directamente a pasar por la trituradora, un buen puñado de proyectos que les dejaron en herencia quienes consideran sus adversarios. En algunas ocasiones, la explicación que se ofrece para no darles continuidad es que no eran buenas ideas y en otros, cuando se intenta no herir sensibilidades ni salir damnificado, lo que se defiende es que se van a introducir cambios para mejorarlos o simplemente que hay que esperar. En ocasiones es cuestión de tiempo, pero otras veces el momento no termina nunca de llegar. La realidad es que cientos de miles de euros de proyectos varados de un mandato a otro se van por el desagüe.

El Gobierno de coalición del PP y Vox ha sido meridianamente claro al defender que paralizaba proyectos porque no es el momento de acometerlos, como en el caso de la 'avenida comercial' que diseñaron el PSOE y Cs para la calle Vitoria, o porque nunca les pareció una buena iniciativa, como fue el caso de la intervención de urbanismo táctico proyectada para la avenida de Derechos Humanos y que perseguía eliminar un carril de la circulación, ganar plazas de aparcamiento y crear un carril bici.

Los casi 40.000 euros que se destinaron a pagar el proyecto de la calle Vitoria afortunadamente no fueron un gran desembolso ya que se pudo aprovechar parte del trabajo realizado en 2014 en cuanto a mediciones y otros detalles técnicos. Eso sí, hay que sumar otros cerca de 50.000 que se emplearon en promocionar esta actuación y en intentar, sin éxito, una gran participación en una consulta ciudadana.

Más dinero se destinó al proyecto de ampliación del archivo de Castilfalé. El Ayuntamiento ha pagado 200.000 euros a los ganadores del concurso de ideas que se resolvió en 2021 y que el año pasado contó ya con el visto bueno de Patrimonio. Sin embargo, el nuevo Ejecutivo ha reconocido que para ellos no es prioritario.

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