El montaje de las casetas de la Feria de Tapas arrancó el pasado lunes con el paseo de la Sierra de Atapuerca como única localización de este año durante los Sampedros, después de que el Ayuntamiento de Burgos excluyera la segunda ubicación de las últimas ediciones, el paseo del Espolón, debido a la celebración de otros eventos. La muestra arrancará este sábado a las 12 horas y se prolongará hasta el 3 de julio, compensando de esta forma la reducción de las jornadas festivas que reivindicaban los hosteleros promotores de la iniciativa, que a su vez tratan de encontrar garantías municipales para la continuidad de la misma en los próximos años.

De hecho y antes de recibir el visto bueno municipal definitivo para esta actividad, la Asociación Por y Para la Ciudad planteó a los responsables del equipo de Gobierno la firma de un convenio de colaboración durante cuatro años que les proporcionará la seguridad de su celebración, tal y como expone su presidente, Pedro Sualdea. «Queremos saber con tiempo si hay o no feria», subraya en referencia a  las dudas que siempre se suelen plantear en torno a su desarrollo. 

Sualdea sostiene que este compromiso permitiría a los hosteleros participantes poder realizar inversiones a largo plazo para mejorar las casetas y, por extensión, la iniciativa gastronómica. En este sentido y a diferencia de lo ocurrido este año, cuando la confirmación llegó con más antelación, en los dos anteriores se dio la situación contaría por distintos contratiempos en los suministros de luz que disparaban el coste a los empresarios y la hacían inviable, salvándose in extremis al suministrar el Ayuntamiento los medios necesarios.

La primera propuesta de convenio del colectivo no ha tenido éxito, si bien Sualdea avanza que insistirán en esa idea durante los próximos años hasta poder conseguir la estabilidad que requieren para dicha muestra (...).

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