El Longevida San Pablo continúa dando los primeros pasos para configurar el proyecto de la próxima temporada en LEBOro y su objetivo es 'atar' cuanto antes a los jugadores que le convencieron la campaña pasada. La renovación de Miha Lapornik está cerrada, la de Micah Speight se antoja complicada y la de Luke Fischer tendrá que esperar. De momento, el pívot americano no quiere precipitarse y prefiere tomarse un tiempo a ver si le sale este verano alguna otra oferta que le seduzca.
Fischer fue uno de los mejores del San Pablo el curso anterior y la dirección deportivo marcó su continuidad y la de algunos de sus compañeros como prioritarias. El pívot estadounidense ve con buenos la opción burgalesa, ya que estuvo muy a gusto con su familia en la ciudad y el proyecto que le propone el San Pablo es potente, pero es un jugador que se mueve en la delgada línea entre la ACBy la LEBOro -sin descartar otras ligas europeas-, así que su apuesta es esperar por si le surge alguna oferta de clubes de mayor categoría.
Todavía es pronto porque queda todo el verano por delante, pero habrá que ver hasta qué fecha estará dispuesto el San Pablo esperarle, pues las opciones a medida que pasa el tiempo cada vez son más limitadas. Cabe recordar que el pasado mercado estival su incorporación no se cerró hasta mediados de agosto y fue una de las últimas de la plantilla.
De momento, la renovación de Fischer sigue estando sobre la mesa del San Pablo porque se trata de un jugador que le dio mucho el curso anterior. El interior americano acabó como uno de los jugadores más valorados de la plantilla con 13.9 créditos por encuentro gracias a sus 10.4 puntos, 5.6 rebotes y casi un tapón de media por partido. A eso hay que sumarle los intangibles tanto en ataque como en defensa.
A sus 29 años, Fischer es un pívot con experiencia en la liga universitaria americana y en varias primeras divisiones de países europeos. Ha estado en Alemania, Francia y España, donde compitió en ACB con el Gran Canaria y el Real Betis. Su primer año en LEBOro fue el pasado y se adaptó a la perfección.