La Guardia Civil ha sido testigo y protagonista de la historia de España durante casi dos siglos. Un cuerpo que surgió para reforzar el trabajo de diferentes instituciones de seguridad pública. Una fuerza armada profesional en un tiempo donde el bandolerismo campaba a sus anchas. A medida que cambiaba la sociedad, la Benemérita se ha ido adaptando a los nuevos tiempos para combatir las diferentes amenazas del país. El teniente coronel jefe de la Comandancia, Alfonso Martín, rememoró cómo fueron los primeros pasos del Instituto Armado y su evolución durante el acto de celebración del 180 aniversario que tuvo lugar en el acuartelamiento de la avenida de Cantabria. Una jornada de fiesta en la que también se refirió a la escasez de efectivos, la cual, advirtió, es muy posible que se cronifique. 

Actualmente hay un déficit de casi 200 agentes en una provincia de una gran extensión. Los últimos concursos de movilidad han ahondado en un problema de personal que se pretende solucionar con convocatorias inminentes y comisiones de servicio. Las de los mandos intermedios, señaló Martín, se están renovando en las últimas semanas por otros seis meses. «Es un proceso natural de refuerzo de la Comandancia», indicó el teniente coronel, que en cierta manera reconoció que la pérdida se resolverá de manera momentánea, pero no definitiva. 

«Burgos, lamentablemente, va a ser deficitaria en guardias civiles. Es un problema igual al de otros cuerpos de funcionarios. Lo estamos viendo con los médicos o profesores, por ejemplo. Es una provincia con buenos sueldos y poco paro y meterse a un puesto público requiere de una oposición que no es fácil. Pero es una fortaleza de este territorio», concluyó.

Minutos antes, en su discurso, ensalzó los valores de la Guardia Civil y destacó su «eficacia», pero también el cariño recibido por la sociedad. «Estamos perfectamente preparados para afrontar cualquier reto del futuro con la capacidad de adaptación que nos caracteriza», prometió. Además, quiso expresar el agradecimiento a todos sus hombres por su trabajo diario, quienes «de forma callada, con tenacidad y constancia, son capaces de dar respuesta a las demandas de seguridad de nuestra provincia». En el acto fueron condecorados con la cruz blanca nueve efectivos.