Es cierto que fue un solo día, pero el 16 de junio de 2023 -en la celebración del Curpillos- quedó meridianamente claro que la mayoría de las pasarelas peatonales que cruzan el Arlanzón no están a la altura ni del río que atraviesan, ni de la ciudad ni de sus habitantes. Los burgaleses que acudieron a la jira accedieron a la Quinta sobre todo por los puentes situados frente a la calle José Luis Talamillo (Capiscol), el estadio del Plantío y los cines Van Golem, cuya escasa anchura provocó más de un tapón, al punto de que en alguna franja horaria tuvieron que ser cerrados. En un día se reprodujeron y multiplicaron por 10 o por 20 los obstáculos con que se topan los burgaleses todo el año: la dificultad de paso simultáneo de una bici y un viandante o la imposibilidad de acceso de una persona en silla de ruedas. Su decadente estética merece capítulo aparte. Por todo ello el Ayuntamiento va a acometer una intervención a lo largo de todo el cauce que transformará la imagen del Arlanzón e incrementará la permeabilidad entre una margen y otra.
La Concejalía de Urbanismo tiene previsto construir dos nuevas pasarelas para peatones, una a la altura del humedal de Fuentes Blancas y una segunda que sería la continuación hacia el parque de la Isla desde la calle Medina de Pomar, en la zona del futuro ambigú. Además, planea la renovación de otros cinco puentes para viandantes, dotándolos de una mayor anchura -al estilo del de Gran Teatro- y con un diseño «original». Se trata de las pasarelas que están situadas frente a la calle José Luis Talamillo, el campo de fútbol del Plantío, los cines Van Golem, Villa Pilar, y la situada justo después del puente de Castilla. El edil Juan Manuel Manso quiere que «cada una sea diferente, pero que en conjunto propongan un discurso coherente, que exista un hilo conductor que sea percibido por los ciudadanos». La utilización de distintos materiales, como acero u hormigón, también es una posibilidad.
El Consistorio ha encargado la iniciativa a la empresa Burgos&Garrido Arquitectos, la que ganó el concurso de Burgos Río. Sus bases establecían que con el estudio que venciera se podía firmar un contrato por procedimiento no negociado y sin publicidad para la redacción del proyecto. Aunque su propuesta original no se va a ejecutar -así lo decidió el equipo de Gobierno- Urbanismo va a adjudicarle el diseño de los dos nuevos puentes y la renovación de los otros cinco. Intervención ha dado el visto bueno y ya hay consignados 512.000 euros para los proyectos. El presupuesto para esta intervención global será de entre seis y siete millones de euros. El inicio de las primeras obras no se hará esperar demasiado. En el Presupuesto del próximo ejercicio ya hay contempladas partidas para la construcción de las nuevas pasarelas, la del humedal y la del Paseo de la Isla.
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