Como en ocasiones anteriores, la primera prueba de la oposición a bombero del Ayuntamiento de Burgos ha recortado considerablemente el número de aspirantes a una de las 16 plazas ofertadas. De los 186 que comenzaron el proceso, ya sólo quedan 66, es decir un 30%. De ellos, ninguno es mujer, pues las siete que se presentaron cayeron en el primer escalón. El próximo ejercicio se celebrará en unos días y los candidatos tendrán que mostrar sus conocimientos sobre el callejero y resolver problemas de aritmética, geometría o matemáticas.

Las oposiciones, a las que se presentaron un total de 186 aspirantes, comenzaron el pasado 19 de septiembre con el ejercicio teórico. Consistió en un test de un centenar de preguntas que versaron sobre ordenanzas municipales, leyes autonómicas o teoría sobre el trabajo de los Bomberos, así como la extinción de incendios o el salvamento de personas.

Pues bien sólo 66 aspirantes consiguieron superar ese primer escollo. Ahora,  deberán enfrentarse a más pruebas teóricas, que serán el segundo escalón y sobre el que ya están publicadas las instrucciones para su celebración en los próximos días. Tendrán que resolver problemas de aritmética, geometría, matemáticas o geografía, además de cuestiones sobre el callejero de la ciudad. Más adelante llegarán las pruebas físicas.

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