Los diferentes departamentos del Ayuntamiento de Miranda se encuentran redactando sus proyectos para incluirlos en el Presupuesto, que dará forma a las inversiones de cara al próximo año. La Concejalía de Obras, con Adrián San Emeterio al frente, también está en ese proceso para diseñar sus propuestas, aunque el edil del PSOE ya las tiene bastante claras. Según reconoce, el Consistorio ejecutará una reforma integral en la calle Ramón y Cajal, de tal manera que esa céntrica vía volverá a acaparar la mayor obra impulsada por la administración municipal, como ya ocurrió durante el curso pasado.
Precisamente, el objetivo pasa por dar continuidad a los trabajos que se ejecutaron a finales de 2022 en las partes de esa calle comprendidas entre Francisco Cantera y Comuneros de Castilla. San Emeterio apunta que el proyecto global «incluiría los tres tramos que faltan hasta llegar a la carretera Logroño», aunque aclara que existe la opción de fragmentar la obra por sectores. Por ejemplo, recuerda que en la reforma integral que se está llevando a cabo en la actualidad en Arenal «podría haberse hecho un tramo más este año, pero se decidió intervenir en la parte de la calle El Cid».
En resumidas cuentas, el concejal reconoce que aún deben estudiar «si existe la posibilidad de hacerlo completo», porque «si hay presupuesto y los medios técnicos lo permiten, se hará todo, pero si no, habrá que repartirla por tramos». Y es que San Emeterio recalca que «las necesidades están ahí y se irá viendo cómo ejecutarlas».
Aunque el equipo de gobierno todavía no ha determinado cuántos tramos de la calle Ramón y Cajal se modernizarán en 2024, el responsable de Obras sí tiene claro cómo quedarán. El concejal remarca que «se va a mantener la estética» en cuestiones como «farolas, paradas de bus o lado ancho» con respecto a la reforma de 2022. Esta decisión implicará que ambas aceras ganarán dimensiones, aunque sobre todo se percibirá el cambio en la de los números impares porque, si se continúa dando la misma morfología a la calle que la anterior obra, directamente se eliminarán los aparcamientos de ese lado.
Todavía falta mucho para que comience esa ambiciosa obra, aunque en la actualidad el Ayuntamiento ya tiene otra similar entre manos: la de la calle Arenal. Esta, con una inversión de 1,4 millones de euros, por ahora «va bien». Así lo explica San Emeterio, quien comenta que el primer paso de la fase inicial «es cambiar el colector». Sobre ello, describe que los operarios ya han instalado casi la mitad de esta ancha tubería en la zona comprendida entre Francisco Cantera y El Cid. Es más, apunta que «esa parte ya se ha cambiado y está tapada hasta el túnel que lleva a la plaza Alfonso VI».
Eso sí, pese al buen ritmo de la reforma, prefiere no adelantar ninguna fecha, pues considera que «si hay cualquier problema, de suministros o de lo que sea, podría variar». Por ejemplo, reconoce que, aunque aún no ha habido grandes retrasos, ya en las primeras labores la empresa tuvo que hacer frente a cierta escasez de tuberías. No obstante, San Emeterio aclara que «como es una obra tan grande y hay tantas cosas que hacer, han ido avanzando con otros trabajos».