A principios del pasado mayo, las agencias de viajes burgalesas ya mostraron su preocupación por un parón en el cierre de reservas de cara a la campaña estival. Un mes y medio después, la situación no es que haya empeorado, aunque tampoco se ha tornado favorable para este momento del año debido a que las ventas avanzan «a trompicones», con días de intensa actividad y otros sin apenas clientes en sus negocios. Por ello y de mantenerse esta tendencia, el sector que agrupa a los establecimientos independientes prevé una temporada estival peor que la de 2023.
La Asociación Burgalesa de Empresarios de Agencias de Viajes (Abeav) atribuye esa inestabilidad, que provoca una ralentización del consumo, a un nuevo incremento en los precios tanto de los hoteles como de los transportes, como es el caso de los billetes de avión o de autobús. Su vicepresidenta, Gema Alonso, sitúa ese alza en torno al 20% que, sumado al del ejercicio anterior, supone un freno para el bolsillo del consumidor. «El verano pasado salió mucha gente», precisa en referencia a ese retraimiento, a lo que añade la circunstancia de tratarse de un sector con un producto vinculado al ocio que «suele convertirse en el primero del que prescinden los ciudadanos».
La patronal reconoce que la evolución de las ventas no se está comportando tal y como se esperaba pese a la remontada que han experimentado los destinos internacionales, donde en este momento la actividad «es mayor» que en la de los nacionales. Sin embargo, considera necesario que exista un equilibrio entre ambos mercados para poder mantener los negocios, a los que se dirigen muchos clientes para pedir información pero que, sin embargo, no confirman la venta.
En cualquier caso y como viene siendo habitual, los burgaleses que sí que han cerrado sus vacaciones con una agencia de viajes se siguen decantando por la costa nacional, con localidades como Benidorm, Gandía, Cádiz o Peníscola como preferencias mayoritarias, entre las que también se incluyen las Islas Baleares, respondiendo así a un perfil de turismo familiar que eligen la costa para su descanso. Respecto a los recorridos internacionales, se incluyen Marruecos, así como Madeira, Croacia y Sicilia en Europa, mientras que en la larga distancia triunfan el Caribe, Uzbekistán y Thailandia.