La colaboración ciudadana ha servido para destapar una oleada de daños contra la propiedad privada en la capital ribereña. En concreto, esta vez se trata de una serie de pinchazos en al menos media docena de coches aparcados en las eras de Santa Catalina. Los vídeos e imágenes de unos vecinos de la zona han servido para comenzar una investigación sobre la autoría de estos actos vandálicos que, de forma casi anecdótica, parecen ser obra de un hombre mayor.

La Policía Local de Aranda tuvo constancia de los hechos a los pocos minutos de producirse. «En cuanto nos llegó el vídeo, una patrulla se desplazó hasta allí y no le cogieron por minutos, ya se había marchado de la zona», aseguran a esta redacción fuentes policiales. Al parecer, algún testigo de la actuación de este hombre llegó a recriminarle su acción y se encaró con él, para irse del lugar acto seguido. En las imágenes se ve a un anciano, con vestimenta clara y una visera, acercarse a un vehículo y agacharse un poco hasta alcanzar una rueda con lo que parece un objeto punzante. 

Las labores de búsqueda e identificación  de este individuo están en manos de la Policía Nacional, al igual que la gestión de las denuncias de los posibles afectados. «Hasta ahora sólo hay una, pero creemos que habrá seis o siete coches afectados», remarcan desde este Cuerpo de Seguridad. Los agentes no descartan que, en los próximos días, acudan más afectados porque los pinchazos en las ruedas no se detectan en el momento. «Puede que alguien haya cogido el coche y la rueda esté bien, pero con el paso de las horas se haya deshinchado», explican, animando a todos aquellos propietarios que detecten algo parecido a que acudan a poner una denuncia.

La investigación va muy avanzada, pero al cierre de esta edición aún no se había identificado con nombres y apellidos al presunto autor de los hechos. El ámbito en el que se desarrollan las pesquisas se ha ampliado a alguna de las localidades cercanas a Aranda, porque se cree que el individuo que aparece en las imágenes podría residir en alguna de ellas. De hecho, un detalle que ha llevado a los agentes a ampliar el radio de búsqueda es que porta en las imágenes una barra de una panadería de uno de estos municipios.

Esta no es la primera vez que en Aranda se registra una serie de ataques contra vehículos. Además de algunos episodios aislados de retrovisores rotos, el más llamativo fue la ola de incendios de coches que recorrió toda la capital ribereña a lo largo de cuatro meses en 2022. El presunto autor, C.P.P. de 40 años, se enfrenta a un juicio en el que la Fiscalía pide para él tres años de prisión y que se iba a celebrar el pasado mes de marzo, pero se retrasó hasta después de este verano.