Buscan al autor del pinchazo de una burbuja de la Catedral

P.C.P. / Burgos
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La Concejalía de Festejos denuncia en Comisaría el acto vandálico, ocurrido entre las 6 y las 8 de la mañana de este domingo, contra la instalación artística Evanescent, el éxito de esta la decoración navideña de Burgos. Se va a reforzar la seguridad

La instalación artística Evanescent ha sido un gran éxito estas Navidades, con un impacto incalculable en las redes sociales. - Foto: Ramis

Esas enormes esferas de colores, que ejercen un efecto cuasi hipnótico sobre quien las mira, han sido el gran éxito de la Navidad en Burgos. Todos hemos recibido una felicitación o compartido una foto con la impresionante instalación artística Evanescent de fondo. Sin embargo, tampoco ellas ha escapado del acoso de los vándalos.

La Concejalía de Festejos ha denunciado en Comisaría el pinchazo de unas de las 12 burbujas de colores de la plaza del Rey San Fernando. Sospechan que ha podido ocurrir entre las 6 y las 8 de la mañana de este domingo, pese a que el entorno está vallado y contaba con seguridad privada para vigilarlo.

Afortunadamente, los artistas dejaron al Ayuntamiento un material especial para afrontar contingencias y esta mañana ha podido ser reparado el puyazo, para después hinchar la bola a su correcto tamaño y permitir que vuelva a brillar en todo su esplendor, hoy destacando entre la niebla. 

La vigilancia se va a reforzar en la zona, a la que todos estos días ya se ha prestado especial atención policial, y se va a realizar una investigación para que el acto vandálico no quede sin consecuencias. No se trata de una patada contra una papelera o un banco, sino de daños a una obra de arte contemporáneo, firmada por Atelier Sisu, integrado por el escultor y diseñador industrial peruano Renzo B. Larriviere y la arquitecta espacial y artista Zara Pasfield.

Fuentes municipales lamentan este comportamiento incívico, que además no se trata de un hecho aislado. El oso gigante colocado en la plaza San Juan, frente al convento de las Bernadas, ha tenido que ser finalmente retirado tras sufrir varios ataques y acabar desmembrado. El primer fin de semana le cortaron un brazo y el siguiente acabó con las dos piernas mutiladas. Por culpa de unos pocos descerebrados, lo que queda de él ha tenido que buscar refugio en el Teatro Principal y su luz ya no se reflejará en más rostros inocentes.