Cuando apenas queda una semana para que comiencen las labores de la poda en verde -la eliminación de los brotes no fértiles- en los viñedos de la Ribera del Duero, todavía está en duda si finalmente se conseguirán a tiempo los más de mil temporeros que necesita la comarca burgalesa para dicho trabajo agrícola. La inquietud y la incertidumbre sobrevuelan cualquier pregunta al respecto. Ningún sector da una respuesta clara y las versiones varían en función de a quién se lance el interrogante.
En Asaja son pesimistas. La bolsa de empleo creada hace semanas por la organización agraria acumula entre 600 y 700 inscritos en toda la provincia de Burgos, cifra que se queda lejos de los más de 1.000 jornaleros requeridos para la poda en verde. La previsión empeora cuando desde Asaja advierten que a la hora de la verdad, cuando toque ir a las viñas, solo la mitad de los registrados aceptará los contratos ofrecidos. "En la bolsa hay gente apuntada de todo tipo de perfiles, el mayoritario sigue siendo el agrícola, pero también han entrado muchos de industria, hostelería...", explican en la asociación agraria.
Por su parte, el coordinador estatal de Unión de Uniones, el ribereño José Manuel de las Heras, es más optimista. "Independientemente de la gente que haya ahora mismo apuntada a las bolsas de trabajo, yo confío en que se pueda hacer la poda en verde", declara, para después añadir que está en contacto con varias empresas que se dedican a la contratación de temporeros y en esas conversaciones no ha detectado preocupación. "Hay gente que se está inscribiendo en diferentes ofertas y todavía quedan unos días para empezar a trabajar en las viñas", incide.
UCCL lanzará esta misma semana a través diferentes redes sociales y plataformas su propia bolsa de empleo con el objetivo de encontrar a los cientos de temporeros que hoy siguen faltando. A día de hoy la Unión ya ha recibido varios mensajes de personas interesadas en trabajar en la poda en verde, aunque el problema es que una parte significativa de esa gente son inmigrantes sin papeles y por lo tanto no van a poder trabajar. Para solucionarlo, De las Heras pide que se permita la contratación de estos extranjeros para a la vez regularizar su situación.
Otra de las medidas que plantean tanto el coordinador de Unión de Uniones como Asaja Burgos es abrir la movilidad entre provincias para facilitar la búsqueda de jornaleros. Respecto a otras iniciativas aprobadas por el Gobierno, como que los parados o los que estén en un ERTE puedan trabajar en el campo sin perder sus prestaciones, las secundan al ampliar el perfil de demandantes de empleo.