La Federación de Empresarios de Hostelería avanza en la organización de los llamados Sampedros en la calle, iniciativa que estrenó el año pasado consistente en sacar las barras a la entrada de sus establecimientos durante las fiestas de la capital. Tras una primera reunión con el equipo de Gobierno del Ayuntamiento el pasado mes de abril, la entidad ha presentado 14 solicitudes de otros tantos establecimientos repartidos por distintas calles, principalmente, del centro que se quieren unir a la actividad.
Se trata de una cifra inferior a la del pasado ejercicio, cuando lo demandaron hasta una veintena de hosteleros, que el vicepresidente de la patronal, Enrique Seco, atribuye en parte a las restricciones municipales que se han impuesto. Una de ellas, según explica, es que estará prohibida la venta de alcohol de alta graduación, lo que ha podido influir la participación.
La Federación tampoco ha logrado la implicación del Ayuntamiento a la hora de confeccionar una programación de actividades que complementen esas barras a pie de calle, tal y como se lo trasladaron sus responsables a la alcaldesa, Cristina Ayala, en el citado encuentro. En su petición incluían desde charangas hasta conciertos y actuaciones de magia, además de la colocación de escenarios de los que el año pasado no pudieron disponer por falta de tiempo.
La demanda quedó pendiente de estudio, si bien Seco explica que finalmente serán los propios empresarios de hostelería los que asumirán el coste económico de las actividades musicales que se desarrollarán en el exterior de los locales. Los establecimientos que participarán en esta iniciativa son: 7.70, Bella Ciao, Bodeguilla de Arrabal, Chupito, El gallinero, El Jaleíto, La gata flora, Garrinson, La espadería, La mafia se sienta en la mesa, la Tasca de San Juan, restaurante La Jamada, Riviera y Top tren.
Los Sampedros en la calle se puso en marcha durante las fiestas de 2023 a iniciativa de la patronal del sector pero abierta a establecimientos tanto asociados como no. Entre las exigencias técnicas, figura que los negocios con terraza instalarán la barra dentro de ella y los que carezcan de veladores deberán respetar una ocupación máxima de 3,2 metros lineales y 7 metros de superficie máxima, siempre cumpliendo con la normativa de accesibilidad municipal.