«Mientras el presupuesto de ingresos está prácticamente estancado, el de gastos se ha disparado, con aumentos del 20% o del 35% en cosas como el personal, los suministros o los materiales, por lo que hay un problema muy serio de cuanto a la financiación, porque los tributos propios son muy pocos y el gasto corriente cada vez es mayor, algo que va a provocar que la partida de inversiones cada vez sea menor». En esos términos se expresa el alcalde de Pancorbo, Javier Cadiñanos, quien considera que esa realidad «es compartida por todos los pueblos» de la comarca de Miranda ahora que están perfilando sus cuentas de 2025. Y no se equivoca, pues en lugares tan dispares como La Puebla de Arganzón, Bozoó, Altable, Ameyugo o Encío confirman esa sensación. Ahora bien, esto no les ha impedido empezar a dar forma a las que serán las principales obras a ejecutar durante el próximo curso, que en muchos casos se centrarán en infraestructuras o nuevas dotaciones y dependerán de subvenciones externas.
CONDADO DE TREVIÑO
Adolfo Estavillo, el alcalde del Condado de Treviño, avanza que harán «unos Presupuestos continuistas» para 2025, en los que volverán a abogar por apoyar a los pueblos que componen este municipio y «dotar de autonomía a esas pedanías» para que puedan financiar proyectos como «la rehabilitación de algunas iglesias». Eso sí, entre las intervenciones que dependen directamente del Consistorio hay algunas a las que se dará prioridad, entre las que el primer edil no olvida «la depuradora de Doroño».
El Ayuntamiento de Encío pretende soterrar el cableado que ahora atraviesa el núcleo urbano por varios postes. - Foto: A.B.PANCORBO
Ante los «pocos recursos disponibles» el alcalde de Pancorbo, Javier Cadiñanos, reconoce que «en toda la legislatura igual se pueden hacer dos o tres obras como tal». No obstante, de cara a las cuentas del próximo curso adelanta que desean incluir iniciativas como la compra de un inmueble para «ofrecer en el futuro el suelo para hacer viviendas porque hay muy poco terreno urbanizable», a lo que se suma «el asfaltado e iluminación del polígono de Cantarranas que está muy dañado por el tránsito de camiones y también la mejora del firme de las entradas al pueblo», o «los 50.000 euros de sobrecoste que tendrá la reforma del edificio para hacer el centro social».
LA PUEBLA DE ARGANZÓN
Si bien es cierto que el Ayuntamiento de La Puebla de Arganzón ha notado mucho ese «aumento de los gastos», el alcalde, Ángel Niño, avanza que pretenden avanzar en una obra importante durante 2025. Según apunta, al margen de inversiones «más pequeñas que aún están por decidir», este municipio modificará «un segundo tramo de la calle central para eliminar las aceras y que tenga mejor accesibilidad», lo cual dará continuidad a la reforma que se ha realizado este mismo año en otra franja de esa misma vía principal.
SANTA GADEA DEL CID
Tras impulsar el aparcamiento de autocaravanas, el vallado de los accesos al castillo o la compra del mobiliario para la Oficina de Turismo en 2024, de cara al próximo curso la administración local de Santa Gadea del Cid pretende dar forma a otros proyectos. El primer edil, Jorge Ortiz, adelanta que desean recabar «fondos externos» para «hacer la segunda fase de la Oficina de Turismo, que será un edificio contiguo», a lo que se suma «el asfaltado de varias calles si se recibe la subvención del plan de emergencias de Garoña» y «la creación del museo de los olores, en caso de que la ayuda del Instituto para la Transición Justa salga bien».
BUGEDO
Juan Manuel Ramos, el alcalde de Bugedo, apunta que ahora mismo su Ayuntamiento está «en un impás» y debe esperar para conocer «cómo va la liquidación» de 2024, antes de definir sus inversiones del siguiente ejercicio. No obstante, reconoce que «poco a poco» les gustaría ir impulsando mejoras como «el saneamiento, abastecimiento y pluviales de las calles», «el arreglo de las grietas» que han salido en el firme, inversiones en el «ciclo integral del agua» o en «la iluminación» del pueblo, así como, obras para garantizar «buenos accesos» a todas las viviendas.
BOZOÓ
En Bozoó este año ya se ha reformado un tramo de calle y se pretende «cerrar la bolera» para convertirla en un espacio multiusos, pero su regidor, Javier Izarra, avanza que de cara a 2025 desean activar el asfaltado de una vía con ayuda de los planes de emergencia de Garoña, la conclusión de la nueva zona ajardinada de la entrada del municipio y también la creación de un aparcamiento. Eso sí, el alcalde aclara que una de sus mayores preocupaciones «es el problema del agua», algo que quiere solucionar «cogiendo agua del pozo que está a la salida del pueblo para llevarla al depósito». Se trata de un proyecto ambicioso. Tanto, que cree que deberán«pedir un préstamo».
AMEYUGO
Sergio Garoña todavía no sabe «exactamente» cuánto podrá destinar a inversiones en Ameyugo, el pueblo en el que ejerce como alcalde. Pese a ello, avanza que en el Presupuesto de 2025 pretende incluir la «mejora del saneamiento y el desagüe de la fuente, porque ahora se queda encharcada». Esa será su obra principal, pero añade que «dependiendo de lo que sobre» podrán acometer otras como «el asfaltado de algunas calles».
MIRAVECHE
Gastos como los de «personal, reparaciones y otras necesidades» afectarán a la capacidad de inversión del Ayuntamiento de Miraveche, como reconoce su alcalde, Jorge Castro. Ahora bien, adelanta que intentarán acometer actuaciones como la compra del«mobiliario del alojamiento rural», «la calefacción del centro social» y, sobre todo, «la obra principal», que será «el arreglo de la carretera al barrio de Silanes, en la que se va a reforzar el firme». Eso sí, desconocen cuántos metros podrán cubrir porque dependerá de «la convocatoria de ayudas vinculadas a Garoña».
ENCÍO
«El tema de las obras habrá subido hasta un 40% y eso limita de poder hacer algo a casi nada». Así opina Jorge González, el regidor de Encío, pero al mismo tiempo apunta que su intención es invertir para «soterrar todo el cableado del pueblo» en 2025, algo que podrá acometerse gracias «a la ayuda bianual de la Diputación».
VALLUÉRCANES
Raúl Caño, el regidor de Valluércanes, asegura que tiene «una planificación» para 2025, pero aún no dispone de un proyecto definitivo. En su caso contarán con ingresos añadidos por la nueva planta fotovoltaica que se acaba de instalar, algo que quizá ayude a financiar iniciativas como «la segunda fase de la rehabilitación del antiguo Ayuntamiento», «la construcción de nichos y columbarios en el cementerio» o «la mejora de calles», así como, «la reparación de los caminos agrícolas» y ciertas inversiones para «hacer más atractivo el pueblo», entre las que tal vez estén «unas instalaciones deportivas».
ALTABLE
El Ayuntamiento de Altable tiene en mente siempre que «el dinero es limitado», como dice su alcalde, Javier Santamaría. Pese a ello, el regidor adelanta que desea «urbanizar una calle que ahora está mal» y«arreglar la fuente grande, porque es un símbolo del pueblo y tiene que rehabilitarse». Todo ello dependerá en buena medida «de los planes provinciales de la Diputación».