El Zurbarán Rock ha logrado superarse. En su sexta edición, celebrada este pasado fin de semana en la Plaza San Agustín, consiguió reunir a unos 10.000 asistentes, aventajando en 3.000 a las cifras del año pasado. Con datos de unos 5.000 espectadores por día, han conseguido también dar color a la ocupación hotelera de nuestra ciudad, puesto que un porcentaje muy significativo de estos amantes del Heavy, venían de fuera de Burgos.
Con un cartel de gran relevancia, se han logrado posicionar como uno de los ciclos de referencia dentro del hard rock nacional. Artistas como Angelus Apatrida, Mike Tramp o Tierra Santa, lograron generar una gran expectación en torno a este evento organizado por la asociación Metal Castellae.
El gran ambiente vivido y la oportunidad de disfrutar que supuso para todos los curiosos y amantes de la música burgaleses, han sido alguna de las claves a destacar de esta propuesta celebrada este fin de semana pasado. Según la concejala de festejos, Carolina Álvarez, no se han notificado grandes incidencias por parte de la Policía Local, lo que invita a seguir confiando en un festival que ya es más que una realidad.
En 16 conciertos se dieron cita grandes nombres llegados desde todos los rincones de la geografía mundial. Se contó con un grupo indio como GATC, que volvió a dar un buen espectáculo después de haber sido el grupo revelación en la edición de 2022, varios grupos europeos como Temperance y algunos locales. Ese fue también uno de los grandes atractivos, el permitir a las bandas locales como Grave Noise lucirse en el escenario Diario de Burgos, o grupos como Sexma, que dieron un gran espectáculo en el Valdorrock.
El Zurbarán se postula así como un proyecto en constante crecimiento, con un compromiso con la ciudad que ha generado un ambiente mutuamente beneficioso.