El proyecto de la perrera deberá modificarse por segunda vez

C.M. / Burgos
-

Los daños estructurales obligarán a reducir el tamaño del edificio de Villafría. No obstante, existe la posibilidad de hacer en un futuro una ampliación en el mismo emplazamiento

Los trabajos llevaban varios meses parados, se retomaron y a finales de octubre volvieron a detenerse. - Foto: Patricia

Hay proyectos que están gafados desde el principio. La remodelación de la perrera, ubicada en el complejo de Villafría, es uno de ellos. El área de Medio Ambiente y Sanidad del Ayuntamiento tendrá que llevar a cabo un modificado del proyecto por segunda vez. Los daños estructurales del edificio hacen imposible seguir adelante y no hay más alternativa. 

El concejal Carlos Niño reconoce que se tendrá que apostar por un edificio de menores dimensiones de las proyectadas inicialmente. «Confiamos en que los plazos no se demoren en exceso y siempre adaptándonos al presupuesto que tenemos», apuntó. 

No obstante, si en un futuro se necesitara más espacio «no habría problema» de llevar a cabo una ampliación de las instalaciones. «Con la futura modificación del Plan General de Ordenación Urbana sí podría construirse otro edificio para el mismo uso o ampliar el existente», añadió. 

Cabe recordar que la remodelación de la perrera es un proyecto que gestó el anterior equipo de Gobierno, formado por el PSOE y Ciudadanos. Se encargó la redacción del proyecto y posteriormente las obras se adjudicaron a Construcciones Ortega por 699.407 euros (100.000 menos que el presupuesto base) y un plazo de ejecución de siete meses (tres menos que lo contemplado en el pliego). Los trabajos se iniciaron en marzo de 2022 pero en julio se paralizaron al comprobar que la zona en la que se ubican las jaulas «estaba peor de lo que se pensaba» y la dirección de obra recomendó parar. Pasaron los meses y se comenzó a trabajar en un modificado del proyecto. Del mismo se desprendió que se necesitaban 138.000 euros más para poder completar las instalaciones que tuvieron que recogerse en una modificación de crédito. La convocatoria electoral y la llegada de un nuevo equipo al Ayuntamiento hizo que hasta julio de 2023 no se pudiera contar con el dinero pero no fue hasta octubre cuando se retomó la obra. 

Sin embargo, la alegría duró poco y tras una semana se volvió a parar debido a la aparición de nuevos daños estructurales en la cimentación, lo que obligará como se ha señalado a modificar el proyecto por segunda vez. Nadie entiende que los redactores del proyecto no detectaran el mal estado de la estructura. La reforma cuenta con fondos europeos que había que justificar antes del 31 de diciembre pero se ha logrado una prórroga hasta junio de 2024 aunque quizás con el nuevo problema se quede corta.