La plantilla del Burgos CF regresó ayer a los entrenamientos en las instalaciones de La Deportiva para preparar el choque del sábado en Mendizorroza ante el Alavés -21,00 horas-. El cuerpo técnico sigue pendiente de la evolución de Gaspar Campos, que sufrió un problema muscular en la zona de los isquiotibiales en el partido ante el Eibar del pasado 8 de diciembre.
Existe la posibilidad de que el joven asturiano esté a disposición de Julián Calero de cara a este inicio de la primera vuelta, aunque es complicado. Lo que tienen seguro en el Burgos CF es que no van a arriesgar lo más mínimo con el futbolista y que en el caso de que haya alguna duda le dejarán descansar una semana más.
Las sensaciones que tenga el jugador a lo largo de la semana serán fundamentales para que los técnicos tomen una decisión definitiva. También los servicios médicos tendrán mucho que decir en este tema.
Es un jugador importante que ha ido creciendo con el paso de las jornadas y que se ha convertido en un elemento imprescindible en el esquema de Julián Calero. La lesión le llegó en su mejor momento.
El que parece que estará sin problemas es Michel Zabaco. Al cuarto de hora del partido ante el Eldense en Copa pidió el cambio, aunque sufrió unas molestias musculares leves de las que ya se ha recuperado.
El que será baja segura de cara al choque contra el Alavés será Bermejo, que cumplirá su segundo partido de sanción después de la expulsión en Granada.