Decenas de personas fueron testigos el pasado domingo de la agresión de un hombre a su pareja en el corazón de Gamonal. Una de ellas era un policía fuera de servicio que decidió intervenir para que el agresor cesara en su actitud y avisar a sus compañeros para que le detuviesen. Este individuo, de nacionalidad colombiana, durmió en los calabozos y ayer pasó a disposición judicial. Sin embargo, quedó en libertad porque la víctima se negó a declarar contra él. 

Los hechos ocurrieron sobre las 12 del mediodía del pasado domingo en la calle Barcelona. Paseantes y vecinos presenciaron cómo un hombre de mediana edad que iba acompañado de una mujer, que parecía ser su pareja, comenzó a gritarla y a amenazarla. La escena causó un enorme revuelo, pero nadie parecía querer intervenir en la pelea. En un momento dado, el a la postre detenido comenzó a empujarla y propinarle manotazos que, según testigos presenciales, le causaron heridas sangrantes en el rostro. 

La víctima logró zafarse de su agresor e intentó huir del lugar. El sujeto salió detrás, pero en ese momento intervino un policía nacional que se encontraba fuera de servicio. En un principio, trató de tranquilizarle para evitar que siguiera pegando a la chica. Lejos de deponer de su actitud, y ante la posibilidad de que el hombre terminase abandonando el lugar, decidió retenerle. 

El agresor intentó escabullirse y se produjo un forcejeo entre ambos. Mientras, algunos testigos optaron por llamar al 112 de Castilla y León, que envió al lugar a varias dotaciones de la Policía Nacional y Local. Una vez allí, lograron entre todos reducir al sujeto para identificarle. Finalmente, fue trasladado a dependencias policiales en calidad de detenido por un presunto delito de malos tratos contra su pareja (...).

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