Al equipo de gobierno de Briviesca le ha salido un apoyo importante para terminar, después de ocho años de parón, las obras de rehabilitación de la Casa Salamanca. El Gobierno, representado por el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, se compromete a que el proyecto de la última fase de las actuaciones pendientes «sea seleccionado para recibir la nueva ayuda estatal del 2% Cultural», que establece los mecanismos de coordinación para la actuación conjunta en conservación, restauración, rehabilitación y enriquecimiento del Patrimonio Histórico Español. Asimismo, el político aseguró ayer en su visita a la ciudad de Briviesca que intentará que «las obras del inmueble finalicen en dos años».
El ministro, acompañado de los miembros de la corporación municipal y otros compañeros de partido, como el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, o la secretaria provincial del PSOE, Esther Peña, conoció la Casa Salamanca y todos los detalles que faltan para que los trabajos se reactiven. Iceta manifestó en reiteradas ocasiones el «interés personal que tiene en que este plan se lleve adelante» ya que los veranos de su infancia los pasó junto a sus primos en la capital burebana, por lo que conserva un especial cariño hacia la localidad y sus vecinos. «Merece la pena que los ciudadanos tengan un centro de referencia y que mucha gente, dentro de un tiempo, recuerde el teatro como recuerdo yo con tanto cariño el cine», añadió.
El gobierno local apuesta por sacar adelante el proyecto y la prioridad absoluta para el grupo municipal socialista se centra en la redacción de un proyecto modificado, con el fin de corregir algunos puntos del antiguo, como ampliar el número de localidades planteadas en un principio hasta las 500 y así adherirse a la Red Española de Teatros, Auditorios, Circuitos y Festivales de titularidad pública, y poder ofrecer al espectador obras importantes subvencionadas. En caso de no recibir subvenciones de las administraciones públicas, al alcalde briviescano, Álvaro Morales, no le temblará el pulso a la hora de solicitar un crédito.
El recorrido por el casco histórico del municipio, declarado Bien de Interés Cultural, se tuvo que acortar como consecuencia de la lluvia, aunque el político también tuvo tiempo de entrar en la iglesia de Santa Clara y disfrutar de su pieza más destacada -el retablo mayor tallado en madera de nogal- y de conocer las instalaciones del Hospitalillo, donde miembros de varias asociaciones culturales le pidieron ayuda para el teatro.