El biólogo briviescano Amonio David Cuesta Segura ha realizado, junto con su colega barcelonés Federico García García, el primer inventario de hormigas de la provincia de Burgos, que ha sido presentado al VII Congreso Ibérico de Mirmecología Taxomara recientemente celebrado en Tres Cantos (Madrid). Tras un trabajo de dos años, el equipo de investigadores ha catalogado un total de 68 especies diferentes, de las que tan solo 13 se conocían hasta ahora. De las 55 nuevas, una lo es para toda la Península Ibérica y ha sido descubierta precisamente por el briviescano. Se trata de la Lasius jensi, una parásita temporal de otras hormigas que es una especie existente en otros países pero hasta el momento no documentada en España.
«Los ejemplares del inventario han sido obtenidos mediante varias salidas por la provincia para muestrear formícidos específicamente, capturas esporádicas en el día a día y muestras recogidas en los filtros de las piscinas municipales de Poza de la Sal» explica el burebano, quien añade que el área abarcada dentro de la provincia ha sido escasa debido a la falta de medios aunque añade que a pesar de ello «los resultados han sido notables».
AMPLIARÁ EL ESTUDIO
No obstante queda trabajo por hacer. Cuesta Segura y su colega catalán tienen intención de seguir ampliando el estudio para llegar a las cien especies centrándose en zonas montañosas. «El interés por la mirmecología ha crecido notablemente en los últimos años y está haciendo que muchas de las zonas que estaban prácticamente inexploradas se estén muestreando, dando como resultado trabajos como el nuestro», apunta. Sobre la importancia del inventario burgalés, el biólogo briviescano afirma que es interesante desde el punto de vista del turismo de naturaleza y además precisa que en los últimos años se está usando las hormigas como bioindicadoras «porque estudiando la riqueza y abundancia de hormigas de una zona, podemos saber cómo de bien conservada está sin necesidad de analizar toda la biodiversidad», indica. Cuesta Segura es licenciado en Biología por la Universidad de León, miembro de la Asociación Ibérica de Mirmecología y editor de la revista Iberomyrmex. Además, se ha formado como guía de ecoturismo dentro del programa de Turismo Rural de Interior y Ornitología (Trino) y acaba de diseñar la primera ruta de aves por Poza de la Sal, la villa natal del famoso divulgador ambientalista Félix Rodríguez de la Fuente. El tríptico reúne 30 aves abundantes que pueden ser vistas durante casi todo el año cerca de las salinas.
Cuesta Segura aspira a convertirse en experto en chinches, de los que en España hay unas 1.600 especies. «Los chinches son mucho más que esos bichos que a veces aparecen en la cama y pican; constituyen un grupo variable que está en todos los ambientes y es muy vistoso», señala. Para conseguir ser experto en este tema necesitará trabajar como mínimo diez años con ese grupo.
El briviescano intenta vivir de la zoología pero reconoce que es difícil. «Veo negro el futuro aquí, en otros países una formación como la mía estaría muy valorada; por ejemplo en Inglaterra o Alemania en cuanto encuentran una especie singular hacen un centro de interpretación y lo dan bombo», afirma.
«En general, se presta mayor atención a especies más próximas al ser humano; un chimpancé o una ave vende más que un insecto», añade. Una vía laboral que sí le atrae y en la que ve posibilidades es la educación ambiental y otra podría ser, según explica, el control de plagas.