El Ayuntamiento de Miranda mueve ficha en lo relativo a la lucha contra el ruido en la ciudad. La asociación que aglutina a los afectados demanda desde hace años medidas concretas para mitigar la contaminación acústica que denuncian. Asuntos como los horarios de las terrazas de los bares, los espectáculos en la vía pública, las actividades en fiestas o la realización de mediciones de los decibelios aparecen en el listado de asuntos por tratar. Todos entrarían en una mesa de trabajo propuesta por la administración local, en la que habría representantes del equipo de gobierno, colectivos vecinales, los propios perjudicados por esta problemática y también hosteleros.
La idea se transmitió por los responsables municipales en una reunión el 31 de octubre, con la que quisieron rebajar la tensión que rodea a esta cuestión desde hace varios años. Posteriormente se oficializó por escrito a la asociación de afectados, en la que tras debatirlo la semana pasada internamente ven como una buena medida el ofrecimiento, pese a que mantienen la cautela. En el colectivo han mencionado en alguna ocasión la puesta en marcha de esta herramienta de consenso en otras ciudades, como en Barcelona, y ayer realizaron una contraoferta a los responsables municipales. Con ella pretenden concretar algunas medidas, ya que consideran que deben saber qué se quiere hacer para sacar resultados y que no sea «algo de cara a la galería», indican.
En un principio, desde el Consistorio proponen que la mesa esté formada por cinco políticos entre los que estarían la propia alcaldesa Aitana Hernando, más concejales como el de Seguridad Ciudadana, Pablo Gómez, o Montserrat Cantera, quien ostenta la cartera de Fiestas. Las reuniones se harían cada quince días y se sumarían varios representantes de los hosteleros y uno de cada asociación vecinal, más los propios afectados. Además, también habría dos técnicos municipales.
Desde la Asociación de Afectados por el Ruido de Miranda esperarán a ver qué se les contesta desde el Ayuntamiento, aunque en principio la idea nace sin limitaciones en cuanto a temas por tratar. Aún así, uno de los que puede tener un mayor impacto tiene que ver con las terrazas, ya que desde el Consistorio han defendido la ordenanza municipal que fija que los veladores pueden estar hasta las dos de la madrugada en verano.
En este sentido, el técnico de Medioambiente llegó a emitir un informe en el que se recomendaba que el consumo en las mesas se limitará a las 23 horas. La existencia del documento se confirmó, aunque el edil de Seguridad Ciudadana desautorizó las mediciones y afirmó en marzo de 2023 que no habría modificaciones en los horarios, algo que en su día se aplaudió desde los bares.
Por lo tanto, si la propuesta municipal sale adelante, habrá que ver en qué terminan otros aspectos polémicos que también habrá que abordar. Uno de los últimos sumados a la lista tiene que ver con la creación de un espacio alternativo, para abandonar el bulevar de la calle Cantabria durante las noches de las fiestas de septiembre.
Recinto ferial. En marzo de 2024, el equipo de gobierno comunicó a los vecinos de Anduva que estudiaban la creación de un recinto ferial en el que hacer los conciertos y colocar las txoznas durante las celebraciones patronales. La Asociación de Afectados por el Ruido transmitió a través de este medio la necesidad de habilitarlo sin que se pueda esperar mucho. En este sentido, hay que tener en cuenta que ahora se redacta el Presupuesto, aunque en el lugar en el que se busca entre la avenida Europa y el Polideportivo no existe suelo municipal y además por ahora no se cuenta con ayuda externa.
Más allá de estos puntos, habrá otros como el uso del sonómetro, algo que se demanda desde los perjudicados por la contaminación acústica, aunque en la plantilla de Policía Local solo hay cuatro agentes preparados para su utilización.