La Policía Nacional de Miranda arrestó el martes por la mañana a J.M.G., el hombre que tuvo secuestrada durante 14 horas a una niña de 9 años en diciembre de 2015 y que cumplió una condena de seis años de prisión por delitos de detención ilegal y abuso sexual. Los agentes le detuvieron en esta ocasión porque, supuestamente, había agredido, retenido y encadenado a una mujer de mediana edad, después de llevársela a su domicilio. El Juzgado de Instrucción de Guardia le dejó en libertad, aunque está acusado de un nuevo delito de detención ilegal y lesiones.

Los hechos tuvieron lugar el lunes. Según la descripción de la víctima que recoge el comunicado de la Policía Nacional, ella se encontraba en el Hospital Santiago Apóstol cuidando a una amiga y un hombre se ofreció a llevarla hasta el centro de Miranda en su vehículo. Mientras acudían a la ciudad el varón se ganó «su confianza», de tal manera que cuando le pidió que le acompañara a su vivienda para recoger unos enseres, la mujer aceptó. En ese momento, según contó la víctima, J.M.G. comenzó a golpearla en la cara hasta que perdió la consciencia.

Cuando recuperó el sentido, el sujeto estaba tratando de asfixiarla con una cuerda. Para impedir que escapara, le había colocado una cadena que ataba las manos en un extremo y el cuello en el otro (...).  

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