La Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil en Burgos explotó a primera hora de la mañana de ayer en la capital una operación contra el tráfico de estupefacientes. En la redada fueron se produjeron dos registros en inmuebles de la calle Eras de San Francisco, a los pies del Castillo, y en El Consulado, una vía paralela. Los efectivos de la Benemérita detuvieron asimismo a dos individuos que están siendo investigados por un presunto delito contra la salud pública y que pasarán a disposición judicial en las próximas horas.
La operación del instituto armado comenzó sobre las 7 de la mañana. Un buen número de efectivos de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS), especializado en dispositivos en los que los investigados pueden presentar gran resistencia durante su detención, descendieron de una furgoneta camuflada ante la sorpresa de los pocos vecinos del barrio alto de la ciudad que a esas horas. Equipados con chalecos, cascos y armas largas, estos agentes llegados desde León para participar en el dispositivo accedieron a una vivienda del portal 13 de la calle El Consulado. Minutos después, el registro se trasladó a otro inmueble ubicado en un vial paralelo, Eras de San Francisco.
La Benemérita se incautó de varios kilos de droga y detuvo a dos presuntos traficantes, si bien no han trascendido ni el tipo de sustancias ni la cantidad total al tratarse de una operación que se encuentra todavía bajo secreto de sumario. Fuentes consultadas por este periódico apuntan, de hecho, que no se descarta que en los próximos días haya más arrestos tanto en la provincia como en otros territorios.
Los investigadores dieron por desarticulados otros dos puntos negros de venta de droga en la ciudad, que se suman al desmantelado hace apenas dos semanas por la Policía Nacional en una zona cercana. El pasado 2 de diciembre, efectivos del Grupo de Estupefacientes se incautaron de aproximadamente un centenar de dosis de cocaína base y detuvieron a una persona.