Los cambios de titularidad de los colegios concertados se han sucedido en los últimos años y ahora es el turno de Nuestra Señora de Lourdes, más conocido como el Zapatito, cuya gestión asumirá el 1 de enero la Fundación Franciscanas Ana Mogas, entidad nacional dedicada a la enseñanza que está al frente de otras 23 dotaciones del país. La modificación no afectará al funcionamiento de la instalación de la calle San Julián, una vez que se han subrogado los contratos del personal, así como con las empresas con las que se trabaja, tal y como confirma Blanca Figler, directora general del centro burgalés.
Hasta el momento, han sido la Orden de las Franciscanas Misioneras de María la que se ocupaban de dicha tarea, si bien Figler explica que tan solo contaba con este colegio en España. La elección de dicha Fundación responde al mantenimiento del ideario franciscano, así como a la trayectoria que acumula en el ámbito educativo. En sentido, precisa que las hermanas «seguirán trabajando por el centro», mientras que la gestión del mismo pasará al ámbito laico.
La directora general subraya que el cambio solo afectará a la titularidad del centro, en ningún caso a la propiedad ni tampoco al concierto que se mantiene con la Junta, que publicó ayer la modificación de la autorización de apertura, manteniéndose tres unidades del primer ciclo de EducaciónInfantil, otras tantas de segundo ciclo, seis de Primaria y cuatro de Secundaria. El número de alumnos supera este curso los 300, con una treintena de trabajadores entre profesores y demás personal.
En línea con el paso dado en el Zapatito, la archidiócesis ha creado también una fundación (Manjón y Palencia) para gestionar los cinco colegios con los que cuenta en Burgos (Saldaña, María Madre, Apóstol San Pablo, San Pedro y San Felices, y Santa María la Nueva y San José Artesano) y así lograr una «mejor coordinación y unidad de actuación», según se explicó en ese momento, mientras que en 2018 fue el Niño Jesús el que cedió su titularidad a la Fundación Educere.
Figler considera que la unión a entidades «más grandes» se está dando con normalidad en la escuela concertada y considera que la decisión de las Franciscanas permitirá «poder alimentarnos de toda la experiencia» de la que dispone Ana Mogas en la enseñanza.