Los chicos de la academia

I.P. / Burgos
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El grupo Juicio Final de Pradoluengo está inmerso en la grabación de su segundo disco, que saldrá tras el verano. Amigos desde la infancia, los 7 se formaron en la escuela Enclave de Música de la villa

Seis de los siete componentes de la banda pradoluenguina en los estudios donde están grabando el disco. - Foto: Valdivielso

Iván Pérez, guitarra y voz; Rubén Pascual, batería; Jorge Santacruz, trompeta y coros; Álvar Saiz, trompeta; Carlos Gutiérrez, trombón; Adrián Gutiérrez, saxo y coros, y Raúl Pascual, bajo. Ellos son Juicio Final, el grupo formado por 7 amigos de Pradoluengo, la tierra en la que vieron la luz y a la que se mantienen anclados. Se mueven entre los 23 y los 26 años y antes de formar Juicio Final en 2019, algunos de ellos, concretamente Raúl, Rubén, Iván y otros amigos subían ya al escenario haciendo versiones de grupos, una forma de iniciarse que comparten muchas formaciones musicales.

Hace poco más de 5 años cogieron y juntaron todos sus instrumentos y decidieron dar un paso adelante con el objetivo de hacer sus propias canciones, es decir, componer y grabar. ¿Quién es el letrista? Todos, aseguran. Quizás llevan más el peso cuatro o cinco, pero al final es un proceso común que nace de ideas en las que trabajan y maduran juntos en torno a una cerveza en el bar donde suelen reunirse en la villa textil; cada uno aporta 'sus cosas', sus vivencias y las letras se van hilando en frases hasta dar un sentido a lo que será el tema final.

Y si devanarse los sesos con letras que reflejan bastante la vida cotidiana, las inquietudes, los problemas, los desamores... de estos chavales, el proceso posterior de grabar, escuchar cómo suenan esas letras es la 'leche', dicen, y luego, que alguien las escuche y las aprenda, lo más de lo más. "Ir a tocar y escuchar a la gente que se sabe las letras te hace muchísima ilusión", comentan Iván y Rubén, que recuerdan que todos se conocían desde niños, eran del mismo grupo de amigos de la villa y todos pasaron por el mismo colegio y la escuela Enclave de Música, conocida como la academia, cada uno especializándose en un instrumento. Más sintonía en los gustos parece imposible.

Nuestras canciones van de nuestras vidas, nuestras experiencias, la amistad, el pueblo, lo que nos va pasando..."
Iván Pérez, guitarra y voz

Están apegados a su pueblo y hasta hace dos años ensayaban en Pradoluengo; ahora lo hace en un local en la capital burgalesa porque todos -excepto Adrián que está en Vitoria, aunque va y viene- estudian o trabajan en Burgos, pero el fin de semana casi es sagrado ir al pueblo. Esos momentos de los ensayos, y en el que están ahora inmersos como es la grabación de su próximo disco, es lo que más les gusta y emociona y eso que se suelen juntar pasadas las 10 de la noche después de una jornada de curro. Lejos de agotarles, les permite desconectar del ajetreo del día.

Este es el segundo disco de su carrera. El primero El límite del tiempo lo grabaron en 2021 con once canciones; la mayoría las compusieron durante la pandemia. "Esos meses de confinamiento fueron muy productivos", añaden. Aunque el primer single del disco le habían sacado en 2019.

Curiosamente, aún no han decidido qué nombre podrán al disco que ahora graban y que en principio saldrá con 5 canciones, aunque pudiera ser que al final opten por retrasar su salida más allá del verano con más temas. Aunque está por decidir. Sí tienen nombre sus canciones que hablan de lo cotidiano, de sus vidas de chicos jóvenes, de la amistad, de su pueblo... algún tema de desamor se ha colado por la experiencia vivida de uno de sus componentes y habrá una canción "sorpresa" dedicada a un lugar del pueblo muy especial para ellos. En todo caso, dejan claro que en sus canciones no se oirán cuestiones políticas, pero sí han puesto el foco en temas sociales como la violencia de género o la despoblación, un tema que les preocupa como jóvenes del medio rural que son. Lo que sí tienen claro es que sacarán un videoclip con uno de los temas y publicarlo como single. Sin nombre aún el disco, sí lo tienen cuatro de las canciones. Sale el sol, Juguetes rotos, Recuerdos y Pequeños detalles. La quinta, la sorpresa, se lo reservan para no romper el hechizo.

La mayoría de las canciones del primer disco las compusimos durante el confinamiento"
Rubén Pascual, batería

En cuanto al estilo, Iván y Rubén coinciden en señalar que "no están encasillados", pero aborda varias tendencias, desde el ska punk, el metal o más punk. Y es que su seña de identidad es no tanto hacer esa música sino hacerla con esa variedad de instrumentos; no es muy habitual encontrar en una misma formación trombón, saxo o trompetas junto a guitarra y batería. Pero en su caso esa mezcla es sinónimo de armonía.

Juicio Final ha participado en diversos certámenes. Así, tienen un segundo puesto en el festival Lif, de la 8 Burgos, en 2019, y terceros en el UBULife. Sus próximas citas veraniegas están en Pradoluengo donde actúan en la quinta edición del Boina Rock (20 julio) que ellos organizan y donde estarán además Silenciado2, Kao Etiliko, No Konforme y Sons of Aguirre, además de la banda de Miranda Hotel Ruido. En Santovenia de Oca tocarán el 9 de agosto y están pendientes de cerrar algunas fechas más.