Furor por las vaquillas en Briviesca

P.C.P. / Briviesca
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Cerca de 4.000 personas disfrutan de la suelta de becerras nocturna en la plaza de toros durante la noche de San Roque

Faltan un par de minutos para la medianoche y no deja de entrar gente. Mucha chavalería, pero también familias enteras con niños que no quieren perderse la que se ha convertido en una de las grandes citas de las fiestas de Briviesca, la suelta nocturna de vaquillas. De día cuesta más y el cuerpo a veces no da para todos los planes, pero por la noche, fresco, recién cenado y duchado, apetece. Además, el tiempo acompaña.

"He estado en muchas plazas, pero como esta ninguna", comenta uno de los porteros que trabaja el empresario taurino Francisco Javier Chacón (Toros Puerta Grande). Anoche, además de los 4 habituales, llegaron otros 4 de Villarcayo como refuerzo. Ya por la mañana, antes del Himno, se vieron colas en el quiosco para comprar las entradas, aunque hay que pagar 3 euros y las diurnas se ofrecen gratis. Se imponen los espectáculos taurinos sin muerte y como divertimento, estilo gran prix. Estos son los 'llenaplazas' de hoy día.

Para las 23.40 horas, cuando sale la barcaza refugio con una decena de 'tripulantes' a bordo al centro del coso, ya parece que está todo lleno, aunque queda hueco, y vaya si queda, porque empezado el espectáculo, continúa el goteo. Dejan la Arcada de Noé plantada en mitad del ruedo, y algunos chavalillos saltan para tomar posiciones y subirse a los rollos de paja que a modo de obstáculo-refugio se han plantado en la arena. Por los altavoces suena, como no, Potra Salvaje, aunque el personal no la corea como en las verbenas. Está más a ver y a que le vean, al fin y al cabo, la suelta de vaquillas se ha convertido en otra cita social en Briviesca. "El Himno es el himno, pero aquí hay que venir también", explica una familia fiel a todos los eventos del programa.

Furor por las vaquillas en BriviescaFuror por las vaquillas en Briviesca - Foto: Alberto Rodrigo

Anuncian los premios del concurso, incluidos 100 euros para la mejor cogida, y sale la primera vaquilla. Pronto se ve quién sale a competir y quién a hacer el tonto. Una patrulla de la Guardia Civil y varios policías locales -Briviesca ha podido recuperar el turno de noche para estas fiestas- vigilan que nadie se desmande. Un espigado joven de verde cita a la becerra y pega el primer salto de la noche, después habrá más, algunos con voltereta incluida, todo un artista.

Media hora después de la medianoche, van por el tercer animal de la suelta y en dentro del ruedo ya pululan cerca de un centenar de chavales. Se anima alguna chica, pocas pero valientes, una con muleta compartida y otra que salta ágil, con peto de peña rosa y negro.

'Atención, cuidado, que van a salir los bueyes', anuncian por el altavoz para jolgorio general. Para entonces el barco de Noé ya no es ni chapula, está totalmente desarbolado, y algunos cuerpos también, por los revolcones de los animales.

Furor por las vaquillas en BriviescaFuror por las vaquillas en Briviesca - Foto: Alberto Rodrigo

Los músicos se animan, los de la plaza de toros, porque los de la verbena deben sentirse muy solos, medio Briviesca está aquí. Suena una melodía inconfundible. 'Si te ha pillao la vaca', y toda la plaza grita: 'Jodeté'. ¡Qué simple resulta a veces pasarlo bien!

(Toda la información sobre las fiestas de Briviesca y las fotografías, en la edición impresa)