El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes a licitar la redacción de los proyectos básicos y de construcción de la futura línea de Alta Velocidad entre Burgos y Vitoria. El trazado tendrá una longitud de 101,3 kilómetros y su ejecución supondrá una inversión estimada de 1.492 millones de euros.
El recorrido, que está integrado dentro del Corredor Atlántico, prolongará la LAV Madrid-Valladolid-Burgos hacia el norte del territorio nacional y supondrá la conexión del País Vasco con la alta velocidad, el enlace con la denominada 'Y' vasca aún en construcción.
El proyecto se ha estructurado en dos tramos: Burgos-Pancorbo y Pancorbo-Vitoria, ambos de vía doble, que suman 90,1 kilómetros. Se redactará a partir de la alternativa de trazado propuesta en el estudio informativo de la línea, aprobado por el Ministerio de Transportes en diciembre de 2021. La LAV atravesará el extremo oeste de la comarca de La Bureba, lejos del conocido como corredor central junto a infraestructuras como la línea Madrid-Hendaya, la N-I o la antigua AP-1.
¿La razón? La protección del visón europeo, una especie en peligro «crítico» de extinción y que habita en los ríos Oca, Oroncillo, Ebro, Bayas y Zadorras. Es más, los redactores de los proyectos tendrán que tener en cuenta que las obras se restringirán en los puntos de cruce con esos cauces entre el 1 de febrero y 1 de agosto, periodo de cortejo y cría de este animal.
La licitación también incluye la construcción de un baipás de hasta 11,2 kilómetros -pero de vía única- hasta la estación de Miranda de Ebro. Este posibilitará tanto la parada de trenes en esta localidad como la circulación de convoyes por las afueras del municipio y que no tengan programado su paso por el centro del mismo.
La salida a concurso que ha dado luz verde el Consejo de Ministros en su reunión de hoy tiene un valor estimado de 27,4 millones e incluye una fase posterior de asesoramiento y coordinación. Se ha dividido en cinco lotes: cada uno de los cuales abarca un subtramo que definirá de modo detallado las obras a realizar para ejecutar la plataforma ferroviaria. Una vez culmine su redacción, el Ministerio de Transportes tendrá que reservar la partida económica necesaria para sacar a concurso y adjudicar los trabajos de construcción.
Cinco subtramos. El primero de ellos comprende la LAV entre la variante ferroviaria de la capital, es decir, desde la estación Burgos-Rosa Manzano, y la localidad burebana de Piérnigas tras atravesar dos túneles, el de La Carrasquilla y el de Rublacedo. Desde este último municipio arrancará el segundo, que culminará en Pancorbo, uno de los puntos críticos del trazado dada la compleja orografía en la que está enclavado. Tras superar dos túneles se llegará a Ameyugo, donde acabará el tercero de los subtramos.
El cuarto unirá este término con Manzanos, ya en suelo alavés, e incluirá la conexión e integración del ferrocarril en Miranda de Ebro además de dos túneles. El quinto y último, con dos pasos subterráneos, conectará Manzanos e Iruña de Oca, donde ya se está construyendo la plataforma que enlazará esta LAV con la de llegada de la alta velocidad e incorporación de los trenes hasta la terminal de Vitoria-Gasteiz, en pleno centro.
(Más información, en la edición impresa de Diario de Burgos de hoy martes o aquí)