El debate este martes en el Parlamento Europeo sobre la situación humanitaria en Gaza ha vuelto a evidenciar la división entre la derecha y la izquierda para pedir un alto el fuego permanente en la Franja, cuando se superan los tres meses de guerra entre Israel y Hamás.
La Eurocámara trabaja en una resolución presentada por los grupos de izquierda para pedir un alto el fuego permanente en Gaza, asunto que ha sido objeto de debate y ha mostrado las divisiones en el seno del Parlamento Europeo sobre la cuestión.
La propuesta de resolución planteada por los socialdemócratas reclama un "alto el fuego inmediato y permanente", "el fin de la violencia, la desescalada y el pleno cumplimiento del Derecho internacional y del Derecho internacional humanitario" en la Franja, poniendo el acento en que los ataques contra civiles constituyen graves violaciones del Derecho internacional humanitario.
En concreto a Israel le pide que "ponga fin a toda acción que constituya un ataque indiscriminado contra civiles" insistiendo en que no puede infligir un "castigo colectivo" a la población de la Franja de Gaza.
Frente a esto, el Partido Popular Europeo rechaza la noción de alto el fuego, insistiendo en que Hamás ha secuestrado la causa palestina e imposibilita una paz sostenible en Oriente Próximo. "En algún momento hay que tomar una decisión y decir no a quienes asesinan mujeres, homosexuales, judíos y cristianos y niegan el derecho a existir de Israel", ha afirmado el eurodiputado del PP Antonio López Isturiz.
En este sentido, fuentes populares explican que sí acepta el término "pausas humanitarias" que ya incluyó la Eurocámara el pasado octubre en una resolución a los pocos días del estallido del conflicto. Entonces se llegó a un pacto de última hora tras una enmienda oral promovida por los liberales que actualizaba el texto de los 'verdes' que exigía un alto el fuego.
De lado de Ciudadanos, José Ramón Bauzá se ha preguntado si el Parlamento Europeo debe pedir el alto el fuego a Hamás que "sigue recibiendo armas de Irán" o a Israel que "se defiende" de una organización que mató a 1.200 civiles el pasado 7 de octubre.
En todo caso, otros diputados liberales están abiertos a aceptar el alto el fuego, aunque podría negociarse retirar la referencia de 'permanente'. "Hamás no pide un alto el fuego, sino más armas a países árabes", ha señalado Nathalie Loiseau, liberal francesa que ha cargado contra Hamás por "martirizar al pueblo palestino" y querer "destruir" Israel.
La ultraderecha rechaza también el término e insiste en que Hamás debe liberar a todos los rehenes tomados el 7 de octubre, como primer paso para reclamar a Israel que cese sus ataques contra la Franja.
Verdes e Izquierda respaldan un alto el fuego permanente
Otros grupos, como Los Verdes o La Izquierda respaldan el texto de los socialistas, como ha quedado a las claras en el debate. "La eliminación de Hamás no se puede hacer a cualquier coste. Los civiles no son combatientes. Los niños no son terroristas y un castigo colectivo contra la Franja de Gaza, incluyendo la hambruna, es inaceptable", ha asegurado el ponente de la resolución, el socialista portugués, Pedro Marques.
Así las cosas, de lado de los Verdes, el diputado de ERC, Jordi Solé, ha cuestionado que no haya "otra respuesta posible" a Hamás que una "carnicería" en Gaza que ha costado la vida a más de 20.000, lo que representa el 1 por ciento de la población. Igualmente ha pedido dirimir en la justicia internacional los crímenes de guerra que se estén pudiendo cometer en la Franja.
Mientras, el eurodiputado de IU, Manu Pineda, ha denunciado el "divorcio" entre las sociedades europeas y sus representantes a la hora de parar los pies a Israel, insistiendo en que resulta "increíble" seguir hablando de operación militar en Gaza cuando se produce un "genocidio" que ha acabado con más de 24.000 personas en 100 días.
La UE sanciona al líder de Hamás
La Unión Europea sancionó este martes al líder de Hamás, Yahya Sinwar, por el ataque que la milicia palestina cometió contra Israel el pasado 7 de octubre en el que murieron 1.200 personas.
Las sanciones suponen la prohibición a que el líder de Hamás pueda entrar en la UE y que se le congelen sus bienes y activos en las entidades europeas.
Además, ninguna empresa o individuo de la UE podrá proporcionarle fondos.
En paralelo, la UE, que considera a Hamás una organización terrorista, igual que Estados Unidos, está ultimando sanciones contra aquellas personas o entidades que proporcionan fondos a la organización palestina.
Al mismo tiempo, está discutiendo la posibilidad de aplicar medidas restrictivas contra los colonos israelíes que han llevado a cabo ataques en los asentamientos de Cisjordania.
Tras el ataque del 7 de octubre, Israel inició la ofensiva en Gaza, en una guerra que dura ya 102 días y que ha causado 24.285 muertos -además de unos 8.000 desaparecidos bajo los escombros- y más de 61.154 heridos, según el último recuento del Ministerio de Sanidad de la Franja, controlado por Hamás.