El valor del suelo industrial en Burgos, en la capital y también los grandes polígonos de la provincia, continúa aumentando por su calidad, su atractivo económico respecto a territorios limítrofes (como el País Vasco o el resto de las provincias de la región) y su creciente escasez. Una prueba de ello es la última retasación de los polígonos impulsados desde la Junta de Castilla y León, que ha fijado una subida de los precios del 8,09% para el periodo 2024-2025 respecto a 2022-2023. Se trata de la revalorización más alta de la Comunidad y se sitúa un 66% por encima de la media regional (4,86%).
La Junta, a través Instituto para Competitividad Empresarial (ICE), gestiona el 11,4% del suelo industrial en Burgos, porcentaje que incluye diez polígonos, principalmente Ircio (Miranda de Ebro), Espinosa de los Monteros, Pradoluengo, Villarcayo y Villalmanzo, además del futuro Parque Tecnológico de Burgos, que aún no está en fase de comercialización ni se ha tasado su valor de mercado, pues continúan sus obras de urbanización (hasta 2025).
En total son 4,8 millones de m2 en manos del ICE, buena parte de los cuales ya están ocupados en las zonas de alta concentración industrial, aunque todavía existen ventas abiertas.
Tras el ICE, los principales propietarios de suelo industrial local son los ayuntamientos o los proyectos municipales compartidos con promotores privados. En conjunto, aglutinan el 72,5% del suelo empresarial, 30,9 millones de m2, entre los que destacan el polígono de Villalonquéjar (de gestión municipal tras el fin del consorcio) que, por su desarrollo, ubicación, accesos, servicios y ya escasez, marca el precio más alto de la región, con un valor de entre 63 y 64 euros el m2.
El SEPES, entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, gestiona 6,2 millones de m2, el 14,5% del total provincial, repartidos entre los polígonos de Allendeduero (Aranda de Duero) y Santa Cecilia (Lerma) y cuyo precio oscila entre los 24,99 en Lerma y los 30-35 euros/metro en Aranda, que son la mitad que en Burgos capital.
Referente. La nueva valoración del ICE, que afecta a todos sus activos inmobiliarios disponibles y en fase de comercialización, ofrece una situación real del mercado en la que Burgos sobresale por el incremento de su valor. Los precios actualizados han subido una media del 4,86%, aunque en la provincia ascienden al 8,09%, el porcentaje más alto y que contrasta con el número de provincias (competidoras directas muchas de ellas) que están por debajo de la media: Zamora (-5,10%), Salamanca (0%), Valladolid (1,04%), Soria (1,85%), León (2,26%), Palencia (4%) y Segovia (4,26%). Solo Ávila se aproxima al alza de Burgos, con un 7,58%.
Esta tasación, fechada el pasado 27 de diciembre, ha sido realizada por la sociedad independiente Arquitasa, que ha revisado todos los precios, pero solo ha actualizado -en el caso de Burgos- los de Ircio y Espinosa de los Monteros, dado que a Villarcayo, Villalmanzo y Pradoluengo les que queda poca superficie industrial por vender.
El tasador establece unos precios/m2 en función de la tipología de parcelas, su uso, su edificabilidad y sus características. En las valoraciones influye el equipamiento del polígono, su densidad empresarial, entre otros parámetros, que se extrapolan a las parcelas similares a cada tipología de cada polígono.
Suma también la ocupación laboral y el nivel de renta del entorno, la densidad de población, las comunicaciones, el planeamiento urbanístico, además de los análisis de mercado, la oferta de venta y alquileres, entre otros.
Ircio incrementa su precio en un 5,01% en industrial [la subida en suelo comercial es mayor, pero no se ha tenido en cuenta, llegando a un 31,4%], pasando de 22,36 euros de media en 2022 a 24,27. Se trata del polígono más comercializado en los últimos tres años en la provincia (por encima de Villalonquéjar), con 49 parcelas vendidas y ocupadas, entre otros, por importantes operadores logísticos (Panattoni o Aldi) a los que ha atraído la cercanía del País Vasco y la competitividad de los precios respecto a Álava, donde se pueden superar los 200 euros el metro.
La Junta ofrece el suelo más competitivo de la región, entre otras cosas porque contempla planes de apoyo a las empresas que se implanten y a las zonas industriales. Miranda tuvo un plan de apoyo económico para su arranque y actualmente están bonificados en el 50% de su precio varios polígonos en Ávila, Valladolid, León y Zamora. Burgos no cuenta con esas ayudas.