El reciente traslado solicitado por un examinador de Tráfico obliga a la Jefatura Provincial a cubrir lo antes posible la plaza vacante y garantizar así el correcto desarrollo de un servicio que ya asume desde hace años la ausencia de otro de sus miembros al estar liberado.

En este momento, Burgos cuenta con cuatro examinadores activos y la Asociación Provincial de Autoescuelas confía en que esta situación no tenga impacto alguno en el proceso de obtención del permiso de conducir a lo largo de los próximos meses. El nuevo presidente de este colectivo, Juan Carlos Ramírez, mantuvo recientemente un encuentro con el máximo representante de Tráfico, Raúl Galán, para tratar un asunto que ocupa, pero no preocupa al jefe provincial.

Tráfico se compromete a cubrir antes del próximo verano la plaza disponible en este momento y considera que el ritmo de exámenes no se verá afectado porque la demanda de alumnos durante los meses de invierno y primavera otorga cierto margen de maniobra para aplicar con acierto el mecanismo elegido en el inminente proceso selección.

En el pasado los examinadores accedían a este puesto de trabajo a través de un exigente sistema de promoción interna. Actualmente, se cuenta con una escala ejecutiva procedente de la oposición pública que ha resuelto el problema de falta de personal. Entre otras ventajas, esta circunstancia permite que Tráfico cuente con una bolsa de interinos, a la que ya recurrió en su momento, y con otros medios de contratación.

«Tenemos que hacer nuestro trabajo, aunque no estoy excesivamente preocupado con este asunto porque contamos con varias promociones de examinadores», asegura Galán, quien recuerda que será Recursos Humanos quien se encargue de determinar la forma adecuada para reforzar a un equipo actualmente diezmado. La plaza vacante se puede cubrir con un interino, mediante un concurso o con un traslado.

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