Los compromisos del Ministerio de Transportes -anteriormente denominado Fomento- con la rehabilitación del ramal norte del Corredor Central siempre han sido muy ambiguos. La última prueba fue la referencia que hizo del mismo el ya extitular de la cartera, José Luis Ábalos, en su visita a Burgos a mediados de mayo. El socialista, que admitió «conocer» la demanda y todas las instituciones y entidades que hay detrás de ella, se limitó a explicar que recibiría «encantado la propuesta en la que están trabajando». El valenciano, al que sustituyó Raquel Sánchez meses después, no dudó en afirmar que desde su ministerio «la analizaremos con rigor y exhaustividad», pero no se comprometió mucho más allá.
El propio Ministerio de Transportes, a través de su revista oficial, ha vuelto a dejar claro el futuro a corto y medio plazo de esta infraestructura ferroviaria. En la misma explican que las nuevas líneas incluidas en la Red Transeuropea de Transporte (TEN-T), a petición del propioMinisterio durante los últimos años, contarán con dotación económica europea dentro del periodo financiero plurianual 2021-2027. Mientras que tramos como el Venta de Baños-Palencia-León-Gijón; el León-Ourense-Vigo-A Coruña o el Alsasua-Pamplona-Zaragoza verán cómo sus plataformas se mejorarán o se desarrolla su red convencional, el ramal norte del Corredor Central, la línea que une Madrid y Burgos a través de Aranda de Duero (el conocido popularmente comoTrenDirecto) se verá relegada de nuevo al ostracismo.
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