De safari en busca de bisontes y uros

A. Valdenebro / Burgos
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Las visitas guiadas a Paleolítico Vivo arrancan mañana en el monte Valcabadillo, donde en 250 hectáreas se podrán ver también caballos salvajes y la recreación de un poblado paleolítico

Mañana se inician las visitas a Paleolítico Vivo, el proyecto ubicado en el monte de Valcabadillo de Salgüero de Juarros que acoge la reserva de uros, caballos salvajes, de las razas przewalski y tarpanes, y bisontes. Esta iniciativa introduce grandes herbívoros salvajes en los cazaderos del hombre de Atapuerca y también recupera fauna, flora, paisaje e historia con fines turísticos y culturales.
La visita consistirá en un recorrido que durará dos horas y se recorrerán unas 250 hectáreas, donde se podrán ver de cerca los animales de la reserva y en especial la bisonte hembra que vino del Natuurpark de Lelystad (Holanda), ya que el macho que llegó el pasado mes junto a la hembra falleció a causa de una anemia pulmonar. Según confirma Eduardo Cerdá, presidente de Paleolítico Vivo, durante la primera quincena de agosto esta previsto que lleguen tres bisontes para completar la manada, dos hembras y un macho.
Además de disfrutar de un recorrido, cual safari africano, los visitantes podrán disfrutar de un poblado paleolítico. Este poblado esta en medio del monte y cobra vida propia con la organización de una programación donde se harán demostraciones del día a día de la vida de los habitantes del paleolítico: cómo era la caza, la pintura, la talla, el fuego y el curtido de pieles. Las cabaña, por otra parte, se acondicionarán  en unos meses de tal manera que si los visitantes quiere pernoctar en ellas, podrán hacerlo.
Los horarios de visitas del que se dispone son: dos turnos por la mañana, uno a las 10 horas y otro a las 12 horas, y por la tarde solo habrá un turno a las 17 horas. Los precios son de 15 euros para los adultos y 12 euros los niños. Para las reservas hay que llamar al teléfono 947421714. Y también a través de su correo electrónico reservas@paleoliticovivo.com. 
Otra de las partes del proyecto es la comercialización de la carne de uro, que comenzará en septiembre, a través de una decena de establecimientos del entorno de Atapuerca como también de la capital burgalesa, que se han interesado en ella. El dinero de esta venta de carne revertirá en el propio proyecto Paleolítico Vivo.