La ópera Minatchi es la tercera obra de envergadura de Antonio José, que compuso más de 150 piezas. La composición que el músico burgalés creó en 1925 se sitúa detrás de El mozo de mulas, la gran ópera aún pendiente de escenificar, y Sinfonía castellana, su obra sinfónica más completa. Minatchi, de la que hasta hace poco apenas se sabía, y que en versión concierto sonó por primera vez en noviembre de 2022, va a adquirir dimensión teatral, convirtiéndose en todo un acontecimiento. Esta oportunidad de ver en escena una ópera de Antonio José Minatchi va a suceder en algo más de un mes, el 18 de febrero, en el Teatro Principal.
Pero decíamos que de esta composición ambientada en la India eran pocos los que habían oído hablar; pero sobre todo es que no se había podido escuchar. La investigación llevada a cabo por el músico y director de orquesta Javier Castro permitió recuperarla para los oídos a partir de la partitura manuscrita en su reducción para piano que se conserva en el Archivo Municipal. Por él supimos que Antonio José la subtituló La aurora del reino y que, pese a que no se estrenó en vida del autor, está traducida al inglés, un aspecto que en las óperas suele realizarse a posteriori.
Como parte de su tesis Castro instrumentalizó la obra para catorce músicos:dos violines, viola, violonchelo, contrabajo, flauta, oboe, clarinete, fagot, trompeta, trompa, trombón, arpa y percusión. Y con solistas de la Orquesta Sinfónica de Burgos y el coro Ars Nova es como se estrenó en versión concierto hace algo más de un año.
Respecto a la trama de la ópera, del libreto que firma Gaspar G. Pintado, un religioso que colaboró con Antonio José, nada se sabe. No se han encontrado los diálogos y su argumento se deduce de lo que aparece en la parte cantada.
Por la partitura sabemos que la historia está ambientada en la India inglesa y que trata sobre el regreso de Minatchi, quizás la hija del rey Chandramathi (el segundo personaje de la ópera), tras abrazar la religión cristiana. Los nativos la rechazan mientras adoran a dioses paganos y surge un desencuentro con el rey. Ella llora esperando la muerte hasta que se le aparece un ángel y al final todos los paganos cantan convertidos.
De la adaptación de esta historia se ha encargado Edurne Rubio, artista visual burgalesa con proyectos que van desde la performance a las películas y los trabajos sonoros (A nublo, Ojo Guareña). La creadora parte de un nuevo planteamiento creativo que se desvelará en su estreno, previsto dentro de la programación de la Gerencia de Cultura del Ayuntamiento.
En este ambicioso proyecto también están involucrados Sergi Gras (productor de Antonio José. Pavana triste), la directora de escena Elena Davidson y los solistas: Sandra Redondo (Minatchi), Adolfo Muñoz (rey Chandramathi), Daniel Estévez (Ammacannú), An Romero (princesa Rukhmani) y Ana Serrano (ángel). Las entradas saldrán próximamente a la venta.