Aunque todavía quedarán dos o tres años para que sea realidad, lo cierto es que se acaba de dar un paso muy importante para desatascar un problema urbanístico enquistado desde 2008 y que permitirá que la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales pueda contar por fin con unos accesos dignos. El Ayuntamiento ha dado luz verde a la modificación del Plan General de Ordenación urbana (PGOU), a propuesta de la Universidad de Burgos, para reordenar toda esta zona y permitir su conexión tanto con Parralillos como con la plaza del Sobrado. 

Para ello, la UBU cederá 2.000 metros de la zona de aparcamiento y será necesario expropiar parte de las huertas para abrir una nueva calle. Se estima que los propietarios recibirán medio millón de euros en compensación y la administración local será la encargada de demoler unas naves colindantes y costear la urbanización, cuyo coste rondará los 500.000 euros. 

La solución ha salido adelante con el acuerdo de todos los grupos municipales aunque el concejal de Urbanismo se salió de la votación por ser funcionario de la UBU. «Se lleva mucho tiempo trabajando entre todas las partes y queremos llegar a acuerdos con los propietarios y evitar los tribunales», señaló, al tiempo que recordó la necesidad de mejorar la zona, dado que se planteaban algunos problemas de seguridad al complicarse por ejemplo el acceso de los bomberos.

En el mismo sentido se pronunció el concejal del PSOE Daniel Garabito, que reconoció el trabajo realizado tanto por el Ayuntamiento como por la institución académica para buscar una solución a este entorno. El acceso actual es muy estrecho, cuenta con una rotonda inacabada y presenta problemas para los vehículos de emergencias. 

La actuación también mejorará la conexión con el acceso a la antigua CLH, donde se ubicará un complejo deportivo e incluirá la urbanización de la calle Camino Villargámar, y conectará con la calle Arlés en la que se prevé dar continuidad al bulevar, cuyo proyecto ha recibido luz verde y en breve se sacará a licitación. 

Por otro lado, el Ayuntamiento ha contratado con Auren Consultores la asistencia técnica para la redacción de la Agenda Urbana y Estrategia Territorial de la ciudad para adaptarse a la Agenda 2030, una condición sin la cual no se puede acceder a los Programas Operativos Plurirregionales que cuentan con financiación europea. El Ayuntamiento debe contar con una hoja de ruta basada en diez objetivos.