El partido que disputarán el domingo el Burgos y el Albacete es de ese tipo de encuentros cuyo valor supera los tres puntos. Lo advertía Juanma: «El que gane dará un golpe encima de la mesa». Se verán las caras dos estilos diferentes, no antagónicos, pero con claras diferencias. Los números así lo muestran y es que se enfrentarán el equipo que menos goles recibe con el más realizador. El duelo estará en las áreas. El poder de contención de los de casa pasará una duro examen contra la pegada albaceteña y al revés.

El conjunto de Rubén Albés lleva 35 goles, los mismos que el Alavés. En 12 de los 27 encuentros que ha disputado hasta el momento ha marcado 2 o más tantos, mientras que solo se ha quedado en 6 ocasiones sin perforar la portería contraria, uno de ellos el que jugó ante el Burgos en el Carlos Belmonte en la segunda jornada liguera.

Ese enfrentamiento es complicado que sirva como referencia, ya que ambos equipos han crecido desde entonces. Ambos han ido a más, han reforzado sus puntos fuertes y llegan a la cita plenos de confianza después de 27 jornadas en las que se han convertido en la sorpresa agradable de la competición.

El Albacete no es un equipo que necesite el balón de forma imperiosa y no amasa el juego como lo hacen otros conjuntos, pero tampoco elude la posesión. Si tiene la pelota sabe salir desde atrás y confeccionar el juego desde su defensa, aunque sus mayores virtudes están en campo contrario. Suele jugar con una presión alta, por lo que trata de robar lo más cerca de la portería de su rival. En muchas ocasiones busca a sus puntas mediante el juego directo y a partir de ahí crea peligro.

Así las cosas, los duelos individuales y las segunda jugadas se convertirán en dos aspectos muy a tener en cuenta durante el partido. El equipo que sea capaz de dominar estas facetas partirá con ventaja con respecto a su oponente. También las transiciones se han convertido una de las armas preferidas del cuadro manchego. Suelen llegar al área contraria con muchos jugadores y el Burgos tendrá que tener especial cuidado con este aspecto.

Tridente goleador. Sus tres hombres de ataque Higinio, Manu Fuster y Dubasin se han convertido en sus piezas más determinantes. Se entienden a la perfección y la velocidad y habilidad de los dos últimos la aprovecha el primero, un jugador más de área que ha logrado ya 8 dianas. Sus dos compañeros de ataque han marcado 7. Entre los tres han conseguido 22 goles, uno menos de los que lleva el Burgos en toda la temporada.

Cerca de los tres goleadores se encuentra el centrocampista Maikel Mesa, ex del Mirandés. Es también un hombre importante y, además de aportar en la construcciones del juego colectivo, llega con asiduidad al área, lo que le ha permitido hacer 5 goles.

El Albacete es un equipo que ha funcionado bien como visitante, aunque ha conseguido más puntos como local. Ha sido capaz de ganar a domicilio a contrincantes como Las Palmas, el Andorra o el Leganés, además de imponerse en el Anxo Carro y La Rosaleda.

Viene de ganar al Málaga en el Carlos Belmonte con remontada incluida, por lo que llega con la moral alta. Además ha ganado 6 de los últimos 8 partidos, en los que ha logrado 19 de los 24 puntos en juego.
Sabe que una victoria supondría un notable paso adelante en su lucha por la sexta plaza y está convencido de que cuenta con los ingredientes necesarios para asaltar un estadio como El Plantío, que el domingo será una olla a presión.